¿Qué causa el cuello torcido?

¿Por qué los niños tienen el cuello torcido? El cuello torcido de los niños es en realidad una enfermedad, también conocida como tortícolis. Si tu bebé tiene tortícolis, ¿qué tiene que ver? Veamos qué le pasa al niño con el cuello torcido.

Una madre dejó un mensaje que decía: Su bebé tiene tortícolis y luego fue. Fui al hospital para recibir tratamiento y descubrí que muchos bebés tienen este problema, entonces, ¿qué causa la tortícolis? ¿Está relacionada con que las madres duerman sobre su lado izquierdo durante mucho tiempo durante el embarazo? ¡Hoy también podríamos aprender sobre este problema!

Las causas de la tortícolis en los bebés

p>

Tortícolis del bebé: desde el punto de vista médico, es un fenómeno en el que la cabeza se inclina o se gira hacia un lado debido a la fuerza muscular inconsistente en ambos lados de la cabeza. el cuello.

La tortícolis es un fenómeno relativamente común en los bebés. Debido a que el feto está en el útero, a medida que el individuo crece y el espacio se vuelve cada vez más pequeño, el cuello del feto se girará gradualmente para coordinar el cuerpo y adaptarse al espacio en el útero. Como resultado de la torsión del cuello, el músculo de un lado del cuello, el músculo esternocleidomastoideo, se estira gradualmente, lo que resulta en una diferencia en la longitud del músculo esternocleidomastoideo en ambos lados del cuello.

Después de que nace el bebé, la cabeza se inclina naturalmente hacia un lado con el músculo esternocleidomastoideo más corto. Si la cabeza del niño se mantiene en una posición neutral o se gira hacia el otro lado, se estirará el músculo esternocleidomastoideo más corto.

Una o dos semanas después del nacimiento del bebé, los músculos estirados seguirán hinchándose y se formará un bulto grande y duro. En este momento, al niño le gusta inclinar la cabeza hacia el lado lesionado, porque esta postura puede mantener los músculos lesionados en el estado más relajado, para no sentirse estirado. A medida que la hinchazón disminuye gradualmente, los músculos lesionados pueden volver a la normalidad o formar cordones fibrosos. Debido a que los cordones fibrosos son rígidos y no tan elásticos como los músculos ilesos, el movimiento de los músculos del cuello de su hijo será limitado.

Tipos de tortícolis en bebés

Aunque la tortícolis en bebés es muy común, no todas las afecciones de "inclinación de la cabeza" se pueden aliviar de forma natural. Para diferentes situaciones, se deben dar diferentes respuestas. Por tanto, los padres deben distinguir el tipo de tortícolis en los bebés.

1. Tortícolis fisiológica

Si el bebé tiene tortícolis a los 3 meses de nacer, suele ser tortícolis fisiológica. Esto se debe a que el cuello del niño no tiene suficiente fuerza al levantar la cabeza y su cabeza es relativamente pesada. Esta afección no requiere tratamiento y generalmente mejora de forma natural alrededor del año de edad. Los padres sólo necesitan prestar atención y observar.

2. Tortícolis patológica

(1) Tortícolis muscular

La tortícolis aparece aproximadamente 2 semanas después del nacimiento y se pueden ver bultos evidentes en el cuello. Respecto a esta situación, actualmente se cree que la tortícolis muscular es causada por tensión y espasmo provocado por lesiones del músculo esternocleidomastoideo de un lado. La causa puede deberse a dos factores: uno es que la presión intramuscular del músculo esternocleidomastoideo aumenta provocando. el músculo a la isquemia y la fibrosis. Otra es la teoría de la fibromatosis, lesiones fibromatosas benignas dentro de los músculos.

Tratamiento: La tortícolis muscular de los 80 se puede curar mediante fisioterapia como ejercicios funcionales. Si no mejora entre los 20 y 1 año, es necesaria una cirugía para aliviarla.

(2) Tortícolis oftálmica

No hay masa en el cuello al nacer, y la tortícolis no aparece hasta los 6 meses. Esta afección puede ser causada por estrabismo. Suele aparecer cuando el niño está mirando cosas y vuelve a la normalidad cuando duerme.

Tratamiento: debido a que requiere la cooperación del niño, la tortícolis limbal no se puede diagnosticar hasta aproximadamente entre 1 y 2 años. No se puede diagnosticar antes y debe revisarse periódicamente.

(3) Tortícolis ósea

La tortícolis ósea es causada por una deformidad de la columna cervical. Se manifiesta como una tortícolis que se presenta después del nacimiento del bebé y puede ir acompañada de síntomas como cuello corto, también llamado síndrome del cuello corto.

Tratamiento: No es necesaria ninguna intervención si el niño no siente molestias. Si se produce espondilolistesis cervical o dolor, los síntomas se pueden aliviar mediante cirugía. Sin embargo, para mantener la estabilidad de la columna cervical durante mucho tiempo, también se necesitan ejercicios funcionales.

Métodos de corrección de la tortícolis infantil

A excepción de la tortícolis patológica que requiere tratamiento quirúrgico, otras afecciones de tortícolis pueden aliviarse mediante métodos de corrección correctos. Entonces, ¿cuáles son los métodos de corrección para la tortícolis infantil?

Los médicos pueden determinar si un niño tiene tortícolis mediante un simple examen físico.

Si no hay una pequeña masa en forma de oliva en el lado más corto del cuello del niño, simplemente corrija la posición del niño para dormir con frecuencia y mantenga la cabeza del niño en una posición neutral tanto como sea posible. Si aparece una pequeña masa en el cuello del niño, los padres deben realizar masajes en el cuello y ejercicios de estiramiento en casa bajo la supervisión de un médico.

Si la tensión y la longitud de los músculos del cuello siguen siendo inconsistentes 2 o 3 meses después del nacimiento del niño, el médico solicitará la intervención de un fisioterapeuta. Un fisioterapeuta utilizará ejercicios de coordinación para estirar el esternocleidomastoideo, el músculo del cuello en el lado más corto. Generalmente, la tortícolis se puede corregir después de 2 a 3 meses de tratamiento. Además, las siguientes acciones también son de ayuda para mejorar la tortícolis infantil.

1. Compresa caliente: aplique una compresa caliente local para relajar los músculos tensos durante unos 20 minutos cada vez.

2. Masaje: Utilice las yemas de los dedos para aflojar los grumos duros, unos 5 minutos cada vez.

3. Ejercicio de estiramiento pasivo: Repite cada movimiento 20 veces.

4. Adecuación del entorno circundante: Atraer al paciente para que gire su rostro hacia el lado afectado. La luz, el sonido y la colocación de los juguetes están todos en el lado afectado.