¡"Autumn Tiger" está en pleno apogeo! Al bañarse, ¿qué períodos de tiempo se deben escalonar para eliminar el problema de la humedad?
Hay un dicho en el "Huangdi Neijing": "Yang, fuera de un día, será fuerte en Pingdan, será fuerte ese día y débil en el oeste. Esto demuestra que". La energía yang de las personas es más fuerte por la mañana, y el Yang Qi es más débil por la noche.
Por lo tanto, las personas que prestan atención al cuidado de la salud "exhibirán su cabello y caminarán lentamente por el patio" por la mañana cuando Yang Qi se levante, acumulando gradualmente Yang Qi. Si se baña en este momento, especialmente si la temperatura del agua es relativamente fría, es fácil dañar el Yang Qi. Además, cuando las personas se despiertan por primera vez, la circulación sanguínea es lenta y varias funciones corporales aún no se han despertado por completo. Cuando la piel es estimulada por el agua, los capilares se abren repentinamente y la humedad y el aire frío del mundo exterior ingresan repentinamente al cuerpo.
El Yin sube y el Yang se pone por la noche, y la superficie del cuerpo carece de protección. Tomar un baño en este momento permitirá que la humedad ingrese fácilmente al cuerpo, especialmente cuando el cabello está completamente seco. La humedad restante en el cuero cabelludo ingresará silenciosamente al cuerpo mientras duerme, provocando que el cuerpo se humedezca. Además, en otoño la diferencia de temperatura entre el día y la noche es grande y la temperatura nocturna disminuye. Ducharse demasiado tarde puede provocar fácilmente un resfriado. Intenta no ducharte a las nueve de la noche de una noche de otoño.
Además, no te apresures a darte una ducha justo después de hacer ejercicio. Al bañarse, los capilares de una persona se abren y el sudor del cuerpo ingresa al cuerpo junto con el baño, lo que resulta en un aumento de la humedad. El enfoque correcto es darse una ducha después del ejercicio hasta que el sudor del cuerpo esté básicamente seco.
En resumen, lo mejor es bañarse en otoño desde dos horas después de comer hasta dos horas antes de acostarse, siendo el horario más adecuado entre las ocho y las nueve.