¿Qué es la desnutrición infantil? ¿Cuáles son los síntomas? ¿Qué opinas?
La desnutrición infantil es una enfermedad crónica de larga duración que se produce por el desequilibrio de la función digestiva del bazo y del estómago, la pérdida de nutrición de los órganos internos, la pérdida de peso y la reducción de la dieta, lo que afecta. el crecimiento y desarrollo de los niños. También se le conoce entre la gente como "desnutrición láctea", "desnutrición del arroz", etc. La medicina occidental lo llama desnutrición, que se refiere principalmente a la insuficiencia de proteínas y calorías. Aunque las condiciones de vida son mejores ahora, la incidencia de desnutrición en los niños sigue siendo bastante alta, por lo que los padres deben prestar atención.
¿Cuáles son las causas de la desnutrición en los niños?
Los bebés y niños pequeños menores de tres años crecen rápidamente y necesitan más nutrientes. Si no insisten en amamantar después del nacimiento, reemplazarán la leche materna con fideos de arroz o gachas y sopa prematuramente. O la adición irrazonable de alimentos complementarios de manera oportuna; o los hábitos alimenticios exigentes a largo plazo del niño conducirán a una ingesta nutricional insuficiente. En segundo lugar, la absorción y utilización de nutrientes son obstáculos. Como diarrea crónica y colitis alérgica, o disfunción pancreática y hepática. Además, aumenta el consumo de nutrientes. Como ascariasis intestinal, tuberculosis, enfermedades hepáticas y estomacales. Además, otros como los bebés prematuros, los bebés pequeños, los partos múltiples o los defectos congénitos también son susceptibles a esta enfermedad.
¿Cómo prevenir la desnutrición en los niños?
Para prevenir la desnutrición en los niños, se debe prestar atención a la lactancia materna; los alimentos complementarios deben limitarse al chocolate, la comida rápida extranjera, los alimentos inflados, los alimentos fritos y otros ricos en proteínas, grasas y calorías. alimentos para evitar el desequilibrio nutricional; reducir los resfriados, la frecuencia de la fiebre y la diarrea; minimizar el uso de medicamentos nocivos para las funciones hematopoyéticas y digestivas; aumentar las oportunidades de los niños para realizar actividades al aire libre;