Precauciones para que los niños coman huevos
Cinco huevos a la semana.
Los niños pueden comer cuatro o cinco huevos a la semana porque su digestión no es buena y su capacidad para absorber huevos es limitada. Aunque los huevos son ricos en nutrientes, no se pueden digerir ni absorber si se comen en exceso, por lo que comer cuatro o cinco huevos a la semana es suficiente.
Las yemas de los huevos deben estar partidas.
Cuando los padres den huevos a sus hijos, no se los coman todos de una vez porque son difíciles de tragar. Es mejor partirlos antes de dárselos a los niños para que sepan mejor. La yema de huevo es rica en colina, que puede promover el desarrollo del cerebro de los niños, beneficiar el desarrollo de la función cerebral de los niños y mejorar la memoria y la capacidad de reacción de los niños.
Consumo moderado
No se deben consumir huevos en exceso porque su contenido en colesterol es relativamente alto. Comer demasiado aumentará la carga sobre el hígado del niño y provocará trastornos del bazo y del estómago. Por eso, además de comer huevos de forma adecuada, los niños también deben comer otros alimentos de forma equilibrada.
Come menos cuando tengas llagas y pus.
Los huevos tienen un efecto fermentativo. Si tu hijo sufre de llagas u otras enfermedades de la piel, debe comer menos huevos para no agravar la afección.