¿Qué es el líquido cefalorraquídeo?

El líquido cefalorraquídeo (LCR) es un líquido transparente e incoloro que existe en el cráneo, con un volumen total de aproximadamente 140 ml. Puede amortiguar las fuerzas externas, reducir el shock y proteger el cerebro y la médula espinal. Además, también tiene una función muy importante, que es llevar nutrientes al cerebro y la médula espinal y eliminar los productos de desecho producidos. El líquido cefalorraquídeo se produce y absorbe continuamente. Si la aracnoides y las meninges se desgarran y el líquido cefalorraquídeo sale debido a un traumatismo, cirugía, etc., se denomina "fuga de líquido cefalorraquídeo", "rinorrea del líquido cefalorraquídeo" que sale de las fosas nasales, "otorrea del líquido cefalorraquídeo" que sale de la oídos o fuga de la incisión después de la cirugía "Fuga de líquido cefalorraquídeo incisional". Más fuentes de información (haga clic para ver)

La fuga de líquido cefalorraquídeo puede provocar una infección del sistema nervioso, con una tasa de incidencia del 2%_9%. Los pacientes infectados desarrollan fiebre alta, dolor de cabeza, náuseas y vómitos. Los casos graves también pueden causar alteraciones de la conciencia, cambios de personalidad, amnesia, comportamiento anormal, incapacidad para hablar e incluso alucinaciones y delirios. Un paciente puede incluso ser admitido por error en un hospital psiquiátrico debido a sus síntomas psicóticos. Algunos de ellos también se complican con convulsiones (epilepsia y claudicación), y los casos graves pueden provocar la muerte en unos pocos días.

Cuando la cápsula de líquido cefalorraquídeo se destruye y aparece una fina abertura, el líquido saldrá. Las causas de la fuga de líquido cefalorraquídeo incluyen: traumatismo en las meninges, tumores que invaden las meninges y provocan fuga y sutura meníngea posoperatoria que no está apretada.

Diagnóstico: El líquido cefalorraquídeo tiene un rendimiento único en las pruebas de laboratorio. Una pequeña cantidad de fuga se puede confirmar mediante pruebas de laboratorio. A veces, la ubicación de la fuga es difícil de encontrar y requiere algunas pruebas, como pruebas de radionúclidos, para hacer un diagnóstico claro.