¿Se pueden detectar problemas hepáticos mediante ecografía B?
La ecografía B puede detectar algunas enfermedades hepáticas, pero algunas enfermedades hepáticas no pueden diagnosticarse completamente mediante la ecografía B sola. Este método de examen utiliza el examen del hígado, principalmente para comprender si hay anomalías en la forma, tamaño, textura, eco, etc.
A través del examen de ultrasonido B, podemos observar más a fondo las condiciones específicas de los vasos sanguíneos y conductos biliares en el hígado, como cálculos en los conductos biliares intrahepáticos, quistes hepáticos, hígado graso, hemangioma hepático y otras enfermedades, que Se pueden descubrir anomalías mediante un examen de ultrasonido B y realizar un diagnóstico preliminar.
Sin embargo, después de todo, el examen con ultrasonido B tiene limitaciones. Algunas lesiones que ocupan espacio en el hígado no se pueden comprender claramente utilizando solo el ultrasonido B. En este momento, es necesario combinar una tomografía computarizada mejorada o una resonancia magnética (MRI) para hacer un diagnóstico diferencial claro de los síntomas específicos de las lesiones que ocupan espacio descubiertas.
También hay pacientes con fibrosis hepática, aunque se puede diagnosticar por primera vez mediante ecografía B, la causa específica de la fibrosis es difícil de determinar. Una vez descubierto el problema de fibrosis, es necesario pasar las pruebas de hepatitis B de 5 ítems y de anticuerpos autorelacionados para confirmar el diagnóstico.