Si quieres ponerte en forma y mantenerte saludable, no tienes que caminar rápido. ¿Qué acciones no se hacen bien y no tienen efecto?
No hay calentamiento antes del ejercicio, ni estiramiento después del ejercicio, ni calentamiento antes del ejercicio, y los músculos no están completamente estirados. Es más probable que el ejercicio cause fatiga y daño muscular. Al final del ejercicio, la sangre almacenada en los músculos esqueléticos de las extremidades inferiores no puede regresar al corazón a través de la contracción muscular sin estirarse o detenerse directamente para descansar, lo que produce hipotensión, isquemia cerebral temporal, palpitaciones, dificultad para respirar, mareos, etc. síntoma. No beba agua durante el ejercicio y beber mucha agua después del ejercicio también está mal. Recomendamos hidratarnos por etapas, especialmente a medida que suben las temperaturas. Durante el ejercicio, asegúrese de reponer agua por etapas. No beba demasiado de una vez, especialmente agua helada, ya que puede irritarle el estómago.
La postura es demasiado relajada. Muchas personas todavía pueden mantener la cabeza en alto cuando caminan rápidamente por primera vez, pero gradualmente sus cuerpos se relajan e incluso se vuelven "jorobados", lo que les da un aspecto relajado. De hecho, es más probable que esta postura provoque fatiga. Además, cuando se acomoda la cavidad torácica, el espacio de estiramiento de los pulmones se "comprime" y la respiración se vuelve más corta, lo que afecta fácilmente la función cardiopulmonar. Mucha gente piensa que caminar rápido significa caminar rápido y dar grandes zancadas hacia adelante. Sin embargo, es fácil tensar los ligamentos internos del muslo y causar calambres, y no puede aumentar la velocidad al caminar. Además, en el caso de personas con malas articulaciones de las rodillas, el daño articular se agravará. Sal a caminar todos los días a tu ritmo más cómodo.
Si caminas rápido tu zancada puede ser ligeramente más larga, pero se recomienda no afectar el aterrizaje natural de tus pies. Si no balancea los brazos durante el ejercicio, su equilibrio al caminar se verá afectado y se caerá fácilmente. A algunas personas también les gusta levantar los brazos por encima de los hombros, pensando que al hacerlo pueden aumentar la cantidad de ejercicio y ejercitar eficazmente las extremidades superiores. Esto afectará la frecuencia de la caminata, provocará fatiga excesiva e incluso tensión en la parte superior del brazo. Aunque caminar a paso ligero es bueno para el cuerpo, el ejercicio debe realizarse de forma adecuada. Cada uno tiene diferentes niveles de ejercicio. Caminar demasiado puede dañar tus piernas. Si hace ejercicio excesivo durante mucho tiempo, puede causar una carga excesiva en el sistema cardiovascular y en el sistema de ejercicio, y también puede causar daños a las articulaciones, ligamentos y huesos.