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Qué es un quiste renal, qué hacer con un quiste renal, quistes renales

Los quistes renales se refieren a anomalías estructurales unilaterales o bilaterales de los riñones y pueden tratarse con medicamentos y cirugía.

Los tratamientos habituales para los quistes renales son los siguientes: 1. Los quistes renales leves simples no presentan síntomas adversos y no tienen impacto sobre la función renal y los tejidos circundantes. Generalmente, no se requiere ningún tratamiento especial y es posible la observación clínica. 2. Si el quiste es grande y supera los 10 cm de diámetro, es posible que se requiera intervención quirúrgica.

Para mantener una actitud tranquila y optimista, se puede realizar ejercicio de intensidad moderada de forma adecuada para evitar traumatismos abdominales. Al mismo tiempo, se debe hacer un buen trabajo en la prevención de resfriados y diversas infecciones. Consuma más alimentos ricos en vitaminas y fibra y no retenga la orina durante períodos prolongados.

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Quiste renal o cápsula renal

Enfermedad

Como su nombre indica, es un término general para las lesiones quísticas en el riñón que no están conectadas con el exterior. mundo. Los quistes renales comunes incluyen quistes renales simples, quistes pararrenales, riñones poliquísticos, etc. Con la popularización de los exámenes físicos y el uso generalizado de la ecografía B y la TC, la tasa de detección de la enfermedad quística renal ha aumentado significativamente y se ha convertido en una enfermedad renal clínica común. Algunos tumores de riñón (como el carcinoma quístico de células renales) tendrán una estructura quística similar debido a la necrosis y la formación de cavidades dentro del tumor, lo que debe ser consistente con la identificación de un quiste renal. Clasificación de la enfermedad Según la causa, la mayoría de los quistes renales son congénitos (hereditarios) y algunos son adquiridos o indeterminados. Una breve introducción a la enfermedad

El quiste renal

(SRC) es el cambio patológico más común en la enfermedad renal humana, que se caracteriza por uno o más riñones de diferentes tamaños en uno o ambos lados La cavidad del quiste no está conectada con el mundo exterior y está llena de líquido del quiste. Las características de esta enfermedad no están claras. La gran mayoría de los pacientes son adultos y los niños son raros. Hay más hombres que mujeres. Con

edad

Aproximadamente el 50% de las personas mayores de 50 años tienen uno o más quistes renales simples, y la tasa de prevalencia llega al 90% entre las personas mayores de 70 años. Los quistes renales simples tienen paredes delgadas y transparentes y contienen un líquido transparente de color amarillo claro. Si hay inflamación, la pared del quiste puede engrosarse, fibrótica o incluso calcificarse. El quiste no está conectado a la pelvis renal y tiene una pared plana de una sola capa.

Células epiteliales

. Los quistes renales simples más pequeños crecen lentamente y tienen poco impacto en la función renal. Tienen una baja probabilidad de transformación maligna y requieren observación regular. Se debe considerar la cirugía para quistes renales simples de más de 4 cm de diámetro, quistes que crecen rápidamente o quistes sospechosos. transformación maligna. Las manifestaciones clínicas suelen ser asintomáticas y muchas veces se descubren de manera incidental durante el examen físico o estudios de imagen para otras enfermedades. Algunos pacientes experimentan "dolor lumbar en el lado afectado"

Dolor lumbar

"Los síntomas generalmente no son causados ​​directamente por el quiste renal. Algunos quistes renales muy grandes, especialmente aquellos con hemorragia intraquística o infección, causarán síntomas evidentes de dolor y malestar en la cintura y el abdomen. Algunos quistes renales comprimen el uréter o el cuello del cáliz renal, lo que puede causar hidronefrosis e infección secundaria, seguidas de síntomas como dolor lumbar, fiebre e infección del tracto urinario. Simplicidad individual

Quiste renal

La pared del quiste se volverá cancerosa y la tasa de cáncer es de aproximadamente 65438 ± 0. Cuando hay sangrado dentro de un quiste, debemos estar alerta ante la posibilidad de cáncer. La ecografía abdominal (o ecografía en color) es la primera opción para el examen físico y la identificación. No sólo puede detectar quistes renales, sino que también sirve como medio de revisión periódica. Si los resultados de la ecografía B no pueden determinar con precisión la naturaleza del quiste, se debe examinar una TC abdominal con contraste. La clave para la identificación es distinguir los quistes renales simples de los tumores quísticos (como los quistes cancerosos o los tumores necróticos internos). En la ecografía B y la TC, la primera aparece como un área oscura, redonda y uniforme de líquido sin realce, pared delgada, eco realzado en la pared posterior y un límite claro y suave entre el quiste y el parénquima renal. En este último, la pared del quiste es irregular, el contenido tiene apariencia de tumor y el quiste está realzado. También debe ser más eficaz con el

Divertículo calicial

TC con contraste o pielografía intravenosa (PIV). Tratamiento sencillo y pronóstico

Quiste renal

Los pacientes progresan lentamente y tienen buen pronóstico, sin síntomas ni compresión ni obstrucción. , no requiere intervención quirúrgica, toma medicamentos orales y no afecta la vida diaria, por lo que una revisión de ecografía B cada seis meses o un año es suficiente.

En términos generales, las indicaciones para el tratamiento quirúrgico de los quistes renales simples son: 1. Personas con dolor lumbar o presión psicológica severa 2. El diámetro del quiste es superior a 4 cm o el volumen ha aumentado significativamente recientemente; el quiste,

Hidronefrosis

Síntomas o lesiones como sangrado, infección, rotura secundaria al quiste; 4. Sospecha de canceración; La descompresión y destechado de quistes renales laparoscópica es actualmente el principal método para el tratamiento quirúrgico de los quistes renales. Este método quirúrgico tiene las ventajas de un traumatismo pequeño, un tratamiento eficaz, un riesgo bajo, una recuperación postoperatoria rápida, un tiempo de hospitalización corto, una cicatrización hermosa de las heridas y una baja tasa de recurrencia. La pared del quiste extirpada debe enviarse para un examen patológico para aclarar su naturaleza. El tratamiento también incluye la punción del quiste bajo la guía de una ecografía B y la inyección de un agente esclerosante (como alcohol absoluto). Sin embargo, este método de punción es riesgoso y tiene una alta tasa de recurrencia, y si el agente esclerosante inyectado ingresa al riñón. pelvis, se dañará la uretra.

El daño causado es extremadamente grave y difícil de reparar, no siendo recomendable su uso.