¡Vale la pena leer estos consejos de salud para la primavera! ¡Presta atención a estos a la hora de cuidarte en primavera!
1. Hacer más ejercicio
En la antigüedad existía la costumbre de salir de excursión. Precisamente porque la primavera está llena y el aire es fresco, es una buena oportunidad para nutrir la energía yang con energía natural. Hacer ejercicio al aire libre no solo puede ampliar su mente y nutrir sus emociones, sino también hacer que su sangre fluya suavemente, evacuar el estancamiento, mejorar su función cardiopulmonar y fortalecer su cuerpo para prevenir enfermedades.
Presta atención a tu alimentación
En la dieta de primavera, presta atención a las proporciones relativas de proteínas, carbohidratos, vitaminas y minerales, y evita comer en exceso, que puede provocar disfunción hepática y secreción anormal de bilis. Específicamente, coma más verduras, coma más alimentos dulces, coma menos alimentos ácidos y beba más agua. Para resumirlo en un jingle: "La primavera es cada vez más cálida. La dieta debe ser ligera y pesada. Coma más verduras frescas y menos vino y carne picantes para garantizar la salud y la longevidad".
Adaptarse al clima
Primavera El clima cambia de cálido a frío Después de usar ropa de invierno durante todo el invierno, la función metabólica es débil y la temperatura corporal no se puede ajustar rápidamente. Si usa ropa fina, puede contraer enfermedades fácilmente y poner en peligro su salud si no tiene cuidado. Como dice el refrán, "La primavera cubre el otoño", recuerda a todos que no deben dejarse engañar por los cambios climáticos temporales. Las personas de mediana edad y de edad avanzada que padecen presión arterial alta y enfermedades cardíacas deben prestar más atención a mantenerse calientes y fríos para prevenir la aparición de accidentes cerebrovasculares, infartos de miocardio y otras enfermedades.
4. Cuidado con la somnolencia primaveral
Debido a la contracción de los vasos sanguíneos de la piel en invierno y al clima cálido en primavera, los vasos sanguíneos y los poros se expanden, lo que hace que la sangre fluya relativamente estable hacia la piel. La piel aumenta y el suministro de sangre al cerebro disminuye, lo que provoca letargo primaveral. Aunque la somnolencia primaveral no es una enfermedad, sí afecta al estudio y al trabajo, por lo que debemos hacer esfuerzos para adaptarnos. En términos generales, es beneficioso dormir 8 horas para adultos, 8 a 9 horas para estudiantes de secundaria y 9 a 10 horas para estudiantes de primaria.