¿Puede el pseudoquiste convertirse en un tumor maligno?
Esta afección incluye quistes hepáticos, quistes pulmonares, quistes de la vesícula biliar, etc. Los pacientes también pueden sentirse muy ansiosos por tener un quiste en el cuerpo.
Entonces, ¿qué es un quiste? ¿Necesitas eliminarlo? Si no se trata a tiempo, ¿afectará la seguridad humana?
¿Qué es un "quiste"?
Un quiste es una enfermedad benigna con una estructura de cavidad quística, una pared del quiste en el exterior y líquido u otros componentes en el interior. Los quistes comunes incluyen quistes hepáticos, quistes renales, quistes ováricos, quistes de chocolate, etc.
Las principales manifestaciones están relacionadas con la ubicación, tamaño, número de quistes y si existe alguna compresión circundante o complicaciones. Los quistes hepáticos simples son raros. Si el quiste es de gran tamaño, puede comprimir otros órganos, como estómago, duodeno, colon, etc., y puede provocar síntomas gastrointestinales, como saciedad después de las comidas, pérdida de apetito, náuseas y vómitos, etc. Si son grandes, también pueden causar dolor abdominal, masas abdominales y compresión de los conductos biliares circundantes, lo que puede provocar ictericia y otros síntomas.
Actualmente, existen tres métodos de tratamiento para los quistes:
Primero, el método tradicional de extirpación quirúrgica de los quistes es abrir una ventana para el drenaje o extirpar el quiste;
En segundo lugar, la resección laparoscópica del quiste es menos invasiva, pero más costosa;
En tercer lugar, la tecnología de drenaje intervencionista por ultrasonido ha surgido en los últimos años.
En circunstancias normales, si el quiste no presenta síntomas, se puede observar temporalmente. Si el quiste mide 10 cm y se acompaña de síntomas de compresión, se puede tratar quirúrgicamente. Los quistes renales simples generalmente son asintomáticos. Los síntomas pueden ocurrir cuando los quistes renales causan compresión de los vasos sanguíneos periféricos u obstrucción del tracto urinario.
En general, los quistes simples no afectarán a la función renal. Si el quiste no es grande, no se requiere ningún tratamiento especial y sólo se requieren 6-1 años de seguimiento. Si el diámetro del quiste renal es de 5 cm, provocando síntomas de compresión graves, que pueden provocar obstrucción del tracto urinario, será necesaria la cirugía.
Recordatorio para el médico: la mayoría de los quistes no requieren tratamiento. Si aparecen quistes en tres lugares, debes estar alerta.
Quistes ováricos
Los quistes ováricos son comunes en enfermedades ginecológicas y se refieren principalmente a estructuras quísticas dentro o en la superficie de los ovarios femeninos. Esta afección generalmente se puede dividir en dos tipos independientemente de la edad. : Quistes fisiológicos y quistes no fisiológicos.
Si se trata de una masa quística única y los marcadores tumorales son normales, es benigna. La mayoría de los tumores tienen menos de 5 centímetros de diámetro y no presentan síntomas específicos. El cáncer generalmente no ocurre. Siempre que lo revises regularmente, el tiempo puede disminuir gradualmente o incluso aparecer durante algunas horas. Esto es lo mejor.
Si este quiste ovárico existe desde hace mucho tiempo, incluso más de tres meses, y todavía está cambiando, como agrandándose, torciéndose, rompiéndose, etc. , esta situación puede provocar fácilmente algunos síntomas adversos en los pacientes, como dolor abdominal, hinchazón, etc. y busque tratamiento médico de inmediato.
Quiste hepático
El quiste hepático es una de las enfermedades hepáticas benignas más frecuentes en la práctica clínica. Para la mayoría de los pacientes, los quistes hepáticos no requieren tratamiento adicional, excepto los quistes hepáticos parásitos.
El quiste hepático parásito se refiere a los vasos sanguíneos del hígado después de que los parásitos invaden los intestinos. Una vez que los parásitos llegan al hígado, se convierten en gusanos adultos y forman quistes hidatídicos hepáticos, que requieren tratamiento quirúrgico; de lo contrario, causarán un gran daño al hígado y pueden volverse malignos.
Sin embargo, en lugar de pensar en el tratamiento, es mejor pensar en la prevención. Después de todo, la prevención es clave.
Quistes pancreáticos
Hay dos tipos de quistes pancreáticos: los quistes verdaderos y los pseudoquistes son los más comunes, y los quistes verdaderos son raros. Si el quiste pancreático es un quiste verdadero, el quiste pancreático es relativamente pequeño y no requiere tratamiento. La observación regular es suficiente y la ecografía B debe realizarse al menos una vez al año, pero los pseudoquistes pancreáticos deben tratarse, especialmente los quistes grandes.
La infección se produce en el interior del quiste. Si la infección es grave, puede convertirse en un absceso, provocando dolor abdominal intenso e incluso sepsis. Debido al rápido aumento de los quistes pancreáticos, los quistes perforarán el tracto gastrointestinal y algunos pacientes sufrirán una hemorragia masiva, que puede provocar la muerte en casos graves.
Los quistes pancreáticos pueden comprimir fácilmente los órganos adyacentes del paciente, provocando síntomas como ictericia.
Si el quiste comprime el conducto pancreático, se dificultará la descarga del jugo pancreático. Los quistes grandes comprimirán el tracto gastrointestinal y provocarán obstáculos en el paso de los alimentos.
Cuando el quiste forma una fístula con la cavidad toracoabdominal, el paciente desarrollará síntomas de ascitis pancreática y derrame pleural. Los quistes infectados pueden romperse fácilmente hacia la cavidad abdominal y formar una peritonitis difusa, que puede poner en peligro la vida en casos graves.
Conclusión:
Para los quistes congénitos, la prevención durante el embarazo es necesaria. Las mujeres embarazadas deben llevar una dieta razonable para garantizar una nutrición equilibrada, evitar tomar medicamentos que puedan afectar el desarrollo fetal y prevenir la exposición a la radiación.
Algunos quistes que se forman después del nacimiento se pueden prevenir. Debe mantener una vida normal, evitar fumar y beber, comer alimentos menos picantes, tomar protección personal al trabajar y jugar, evitar lesiones, prevenir parásitos e infecciones bacterianas y acudir rápidamente a un hospital público regular para ser examinado y tratado después de una enfermedad. formación de quistes.
Si ya existe un quiste, se puede observar y tratar si los síntomas son leves. Si el quiste es más grande, se puede extirpar quirúrgicamente.