¿A qué debe prestar atención en la atención médica de primavera?
Desde el punto de vista de la ciencia dietética, las proporciones relativas de proteínas, carbohidratos, vitaminas y minerales deben mantenerse en primavera para evitar comer en exceso, una función hepática anormal y una secreción anormal de bilis.
2. La dieta debe ser ligera
Desde el sabor espeso del arroz de invierno hasta la temperatura suave, la dieta debe ser cálida y evitar el frío. Las personas con el estómago frío a menudo pueden comer jengibre para aliviar los resfriados y calentar el estómago; los pacientes con asma pueden tomar un poco de agua con miel de jengibre para humedecer la sequedad y aliviar los pacientes con asma que deben ayunar o comer alimentos menos picantes. Otros no deben comer alimentos más irritantes para evitar dañar el cuerpo al apoyar el fuego.
3. Proteger el hígado y la vesícula biliar
La primavera empeorará algunos pelos en el hígado y la vesícula biliar. Para proteger el hígado y la vesícula biliar, evite cualquier químico en el medio ambiente, coma menos aceite animal y alimentos fritos, vaya menos a restaurantes, manténgase alejado de los aceites de baja calidad que se usan para cocinar y coma 1 o 2 puñados de nueces todos los días. Debes comer buenos aceites, como el aceite de oliva y los aceites exprimidos de nueces y semillas. Actúan como lubricantes, haciendo que las partes del cuerpo sean más flexibles, saludables y menos propensas a oxidarse. Cuando el Qi del Hígado es cómodo, los ligamentos, tendones y articulaciones de las personas no se ponen rígidos.
4. El aumento del Yang y la prevención del viento
"Nutrir el Yang y prevenir el viento" es el principio que se debe seguir en el cuidado de la salud en primavera porque el Yang Qi del cuerpo humano se ajusta a la naturaleza. brota e irradia hacia arriba y hacia afuera, por lo que debemos prestar atención a protegerlo en el cuerpo y evitar cualquier situación que dañe el Yang Qi. Además, la primavera es ventosa y los resfriados son la principal causa de infecciones externas en primavera, que pueden provocar diversas enfermedades infecciosas y epidémicas, por lo que también debemos "prevenir el viento".