¿Cómo debo quedarme quieto?
Tener un bebé consume mucha energía y fuerzas, por lo que conviene prestar atención a los complementos nutricionales durante el confinamiento. Muchas mujeres embarazadas simplemente comen y beben durante el segundo mes. Unos huevos al día son sopa de manitas de cerdo o sopa de gallina vieja. Una suplementación adecuada es apropiada, pero se debe prestar atención a la suplementación científica.
Un máximo de dos huevos al día, beber sopa de leche una vez cada dos días, evitar el consumo excesivo de grasas, comer más frutas y verduras para complementar diversas vitaminas y beber más agua tibia para favorecer el metabolismo. La pérdida excesiva de sangre después del parto requiere beber agua con azúcar moreno, pero beberla hasta por diez días es suficiente. Beberlo todos los días provocará un aumento de los loquios, pérdida de sangre y la ganancia supera la ganancia.
Durante el confinamiento no hará frío. La intrusión de aire frío en el cuerpo hará que la inmunidad del cuerpo disminuya, lo que hará que sea más fácil enfermarse a medida que envejece. Sin embargo, no puedes tapar la luna. Por ejemplo, en un día caluroso, debes usar ropa larga, mangas largas y un sombrero. Si sudas, no puedes encender el aire acondicionado. Esto es incorrecto. Puedes encender el aire acondicionado, siempre y cuando evites que el viento sople en dirección contraria.
Algunas madres no se duchan, no se lavan el pelo ni se cepillan los dientes. Estos son malos hábitos. Báñese frotándose o duchándose en lugar de sentarse en la bañera; lávese el cabello una semana después de dar a luz y séquelo inmediatamente; cepíllese los dientes todos los días con un cepillo de cerdas suaves y agua tibia;