Desarrollo intelectual durante el confinamiento
Primero, alimentos demasiado salados
Durante el confinamiento lo más adecuado es una dieta ligera. Se puede ingerir sal, pero hay que controlar la cantidad. Si come demasiada sal, ejercerá presión sobre la función renal de su caballo y aumentará fácilmente su presión arterial, dañando así su salud.
En segundo lugar, la esencia de pollo tiene muchos ingredientes.
El componente principal de la esencia de pollo, el glutamato de sodio, se utiliza como condimento a ciegas. Los adultos pueden comer una parte al día sin afectar su salud. . Sin embargo, comer demasiado glutamato de sodio consumirá mucho zinc en el cuerpo. Las madres que amamantan consumen una gran cantidad de glutamato monosódico, que puede pasar al bebé a través de la leche, lo que provoca una deficiencia de calcio en el cuerpo del bebé y perjudica el coeficiente intelectual y el crecimiento y desarrollo físico.
En tercer lugar, alimentos crudos y fríos
No es recomendable ingerir alimentos crudos o fríos durante el confinamiento. Debido a que el tracto digestivo de las madres embarazadas ha cambiado después del parto, lleva algún tiempo repararlo. La comida fría puede dañar el tracto gastrointestinal y provocar síntomas como indigestión y dolor abdominal. Si alimenta a su bebé con alimentos crudos o fríos, es posible que sufra fácilmente indigestión y otras molestias.
Cuarto, comida picante
Algunas madres que aman la comida picante sienten que pueden comerla sin restricciones después de dar a luz. Para las madres que amamantan, los alimentos picantes todavía no están permitidos porque pueden causar fácilmente ansiedad, estreñimiento y otras molestias. Si las cosas siguen así, la indigestión en los bebés provocará indigestión.
5. Comida demasiado grasosa
Después de dar a luz, Ma Bao debe comer alimentos ligeros y fáciles de digerir. Los alimentos ricos en calorías no se pueden digerir ni absorber, lo que provoca hinchazón e indigestión. Al mismo tiempo, los alimentos ricos en calorías tienen un alto contenido en grasas, que el bebé no puede digerir y absorber según la cantidad de leche, reduciendo la ingesta de nutrientes.