¿Cómo cultivar azaleas?

Para cultivar azaleas, primero debes elegir un suelo de cultivo adecuado. Las condiciones básicas para la propagación de las azaleas son un drenaje suave y suelto, buena ventilación, suelo ácido y humus rico y suficiente fertilizante base. Los rododendros prosperarán en suelos ácidos pero se marchitarán rápidamente en suelos alcalinos. El suelo de humus es generalmente un suelo ácido, entre los cuales el suelo de humus de pino es el mejor y es un suelo de cultivo ideal para cultivar azaleas. Consiga tierra debajo del bosque de pinos y cipreses en la zona montañosa, o bajo tierra donde se plantan muchos pinos y cipreses en el jardín. Agregue un poco de azufre en polvo y alumbre antes de usarlo para aumentar la acidez del suelo. Los suelos con un alto contenido de humus son los mejores para la reproducción de rododendros. Tiene una gran cantidad de humus, que puede reponer los nutrientes del suelo de manera oportuna, mejorar la estructura del suelo, hacer que el suelo retenga agua, fertilizantes, airear, absorber calor y mantener el calor, reducir el daño de las sustancias tóxicas en el suelo. Y promover la expansión del sistema de raíces del rododendro.

Regar los rododendros también es una tarea muy importante. El sistema de raíces del rododendro es débil y estar demasiado seco o demasiado húmedo no favorece el crecimiento de las plantas. Al propagar el rododendro, se debe prestar especial atención al control de la cantidad de agua. La falta de agua durante el desarrollo de las hojas hará que las hojas de azalea se pongan amarillas y las ramas y hojas se enrollen. Si lo haces en serio, morirás. La falta de agua durante el período de floración hará que los pétalos se ablanden y se encojan, las flores se caigan, el color no será brillante y las flores incluso se marchitarán y marchitarán. Por lo tanto, el riego de las azaleas debe realizarse de acuerdo con el clima, la humedad del aire y el contenido de humedad del suelo. Riegue temprano en la mañana y en la noche, pero no al mediodía, especialmente en el caluroso verano. A la hora de regar hay que fijarse en si hacerlo o no, pero hay que regar a fondo y no a medias. Es mejor utilizar agua de lluvia natural, agua de río y agua de estanque que no contenga impurezas como drogas y polvo blanqueador. El agua del grifo no es adecuada para un uso prolongado. El agua acidificada es la de mejor calidad. El método habitual consiste en rociar una pequeña cantidad de sulfato ferroso en la superficie del suelo cada dos semanas o agregar 1 parte de vinagre al agua para mantener el suelo ácido.