Estándares de sanciones de Japón para el fraude de drogas
El gobierno local también afirmó que, según los últimos datos, más de 300 personas han consumido este medicamento y algunos pacientes incluso perdieron repentinamente el conocimiento después de tomarlo, lo que provocó muchos accidentes de tráfico. También hay información de que dos pacientes murieron después de tomar el medicamento, pero el vínculo exacto entre los dos incidentes sigue siendo incierto. Además, durante la investigación, el gobierno del condado también descubrió que más del 80% de las empresas farmacéuticas habían falsificado registros de datos experimentales, e incluso los ejecutivos de las empresas aceptaron este asunto. El incidente de fraude duró más de 40 años e involucró una gran cantidad de drogas.
El incidente de fraude también desencadenó una serie de reacciones en cadena y muchas compañías farmacéuticas japonesas lo cancelaron. Por ejemplo, Kobayashi Pharmaceutical China declaró que Kobayashi Chemical involucrada en el incidente no está relacionado con Kobayashi Pharmaceutical y que las dos partes no tienen ninguna relación de inversión.
Materiales de referencia:
El gobierno de la prefectura de Fukui ordenó a la compañía farmacéutica japonesa Kobayashi Chemical Company que suspendiera las operaciones de rectificación el día 9. El motivo fue que un medicamento oral producido por Kobayashi. Chemical Company se mezcló con una cantidad excesiva de ingredientes hipnóticos causando daños a la salud de muchas personas. Los medios locales dijeron que este incidente también involucró el fraude a largo plazo de la compañía y la aprobación tácita de sus ejecutivos. ¿Ocho grandes errores? Algunas estafas duraron 40 años.
Según informes del Asahi Shimbun y otros medios del 5 de junio de 2000, debido a una serie de operaciones ilegales, las tabletas de itraconazol, un medicamento antifúngico oral, producidas por Kobayashi Chemical Company para el tratamiento de la tiña del pie y otros enfermedades contenidas Estaba mezclado con ingredientes hipnóticos que eran 2,5 veces el límite máximo regulado por Japón, causando daños a la salud de 239 pacientes que tomaron el medicamento recetado. Algunos pacientes perdieron el conocimiento después de tomar el medicamento, lo que provocó 22 accidentes de tráfico. Otras dos personas murieron después de tomar la droga, pero no está claro si hubo un vínculo causal entre esas muertes y su uso de la droga.