¿Por qué los padres no utilizan la ironía al educar a sus hijos?
¿Cuáles son entonces los peligros de la sátira?
En primer lugar, hablar con ironía a los niños hará que se confundan y no entiendan lo que dicen sus padres.
Generalmente, los niños pequeños no entenderán otros significados de sus padres según el tono y la expresión de sus padres. Si los padres a menudo se burlan de sus hijos, les resultará difícil distinguir lo que está mal y lo que está bien. Con el tiempo, afectará seriamente su sentido del bien y del mal. ?
El sarcasmo con los niños también hará que los niños pierdan la confianza en sus padres, porque sienten que es demasiado difícil distinguir entre lo que dicen los adultos y lo que ellos dicen, por lo que no pueden confiar en lo que dicen sus padres.
Además, el sarcasmo puede dañar la autoestima del niño. Por ejemplo, algunos padres a quienes les gustan sus hijos pueden decir que eres un pequeño malo, un fantasma travieso, un pequeño tonto, etc.
Estos son nombres cariñosos para los niños por parte de los padres, pero para los niños, pueden malinterpretarlos y pensar que sus padres los están criticando y negando, y que no les agradan.
Finalmente, los padres suelen ser sarcásticos y sarcásticos con sus hijos, lo que repercutirá negativamente en la comunicación de sus hijos con otros niños. Para los niños, la imitación es su naturaleza. Los niños cuentan a otros niños lo que escuchan de sus padres. Por ejemplo, si un niño llama estúpidos o malos a otros niños, otros niños se enojarán mucho en el futuro. O incluso aislar a su hijo.
Para resumir, la razón es que el niño aún es pequeño y no puedes saber si lo que dijiste es bueno o malo. Si su hijo comete un error y usted dice algo sarcástico y comprende que lo está elogiando, será difícil corregir su error.
Por lo tanto, si el niño es demasiado pequeño, los padres no deben ser sarcásticos, sino que deben brindarle una orientación correcta y positiva basada en la situación real del niño y su capacidad de recepción del lenguaje.