Algunas personas dicen que la vida está en el ejercicio, mientras que otras dicen que el descanso es la única forma de vivir más tiempo. ¿Qué afirmación es correcta?
¿Qué es más valioso para la salud y la longevidad, el ejercicio o la inactividad?
La razón por la que algunas personas piensan que las personas vivirán más tiempo cuando estén quietas se basa en investigaciones científicas que demuestran que la frecuencia cardíaca de los animales y la esperanza de vida están correlacionadas negativamente. En los animales, si hacen demasiado ejercicio, el ritmo cardíaco será más rápido.
Por ejemplo, la frecuencia cardíaca de un ratón es de 450 latidos por minuto, y la vida útil de un ratón suele ser de sólo un año, mientras que la frecuencia cardíaca de un elefante es de unos 30 latidos por minuto. Los elefantes pueden vivir hasta los 70 años, mientras que las tortugas tienen una frecuencia cardíaca de solo unos 20 latidos por minuto, por lo que su esperanza de vida es de miles de años, por eso hay un dicho que dice que una tortuga de mil años tiene mil años. tortuga vieja.
Basándose en esta teoría, creen que la tranquilidad puede conducir a la longevidad, volverse sabio y puede reducir el desgaste físico. Si estás débil, el ejercicio perjudicará tu energía y deberás descansar.
Aunque esta afirmación parezca razonable, esta ley no se aplica a los humanos.
Aunque los humanos también son animales avanzados, su frecuencia cardíaca es muy similar a la de los cerdos, perros y otros animales, pero su esperanza de vida es diferente a la de estos animales, y su esperanza de vida es aproximadamente 5 veces más larga.
Según una investigación de la Universidad de Harvard, las personas que caminan más de una hora a la semana vivirán unos 4 años más que aquellas que no hacen ejercicio.
Entonces, es bien sabido que el ejercicio es bueno para la salud, pero no hay investigaciones científicas que demuestren si estar quieto es bueno para la longevidad.
Son muchos los beneficios del ejercicio. El ejercicio puede promover la circulación sanguínea, acelerar el metabolismo, ayudar a quemar el exceso de grasa en el cuerpo, mejorar la inmunidad, aumentar la resistencia a las enfermedades, mantener la fuerza física, prolongar la vida y retrasar el envejecimiento.
El ejercicio tiene tantos beneficios, ¿todavía hay que trabajar duro para vivir más tiempo?
Hemos enfatizado repetidamente la necesidad de realizar ejercicio moderado, por lo que el ejercicio no es sólo ejercicio excesivo, sino también ejercicio moderado. Si hace demasiado ejercicio, puede ser perjudicial para su salud.
En primer lugar, el ejercicio excesivo puede provocar tensión muscular, dañar huesos y articulaciones e incluso provocar fracturas por estrés. En segundo lugar, el ejercicio excesivo provocará la acumulación de ácido láctico en los músculos y aumentará la carga sobre los riñones. En casos graves, puede provocar daño renal, insuficiencia renal, etc.
En términos generales, la frecuencia cardíaca de una persona normal cuando no hace ejercicio es de unos 60 a 100 latidos por minuto. Si es inferior a esta frecuencia, necesitan hacer ejercicio, de lo contrario su salud se deteriorará y su vida se verá afectada.
Si la frecuencia cardíaca después del ejercicio es un 50% mayor que antes del ejercicio, se considera moderada. Si tu frecuencia cardíaca es muy alta después del ejercicio, entonces bájala. Si es lento, puedes aumentar la intensidad del ejercicio.
En segundo lugar, el ejercicio debe adoptar un enfoque científico.
Cada uno puede adoptar métodos de ejercicio adecuados según sus propias preferencias y condición física. No elijas ejercicio extenuante. Para las personas mayores y enfermas, lo mejor es optar por caminar a paso ligero, hacer yoga, trotar y otros ejercicios.
En la actualidad, debido al periodo especial, muchas personas no pueden acudir al gimnasio a hacer ejercicio. Se recomienda tener en casa una esterilla deportiva en cualquier momento para facilitar algunos ejercicios de yoga o fitness.
Además, no te concentres únicamente en el ejercicio e ignores la nutrición. Con una suplementación nutricional adecuada, la inmunidad será mejor y los efectos del ejercicio serán mejores.
Durante el ejercicio, los nutrientes que necesitamos complementar son hidratos de carbono, grasas y proteínas. La proporción de distribución general es 60% de carbohidratos, 20% de proteínas y 20% de grasas, lo cual es relativamente razonable.
La suplementación con proteínas desempeña principalmente un papel en la reparación de las fibras musculares dañadas durante el entrenamiento de alta intensidad.
Finalmente, recuerda que sentirás sed después de hacer ejercicio, pero no bebas mucha agua de inmediato. Si bebe demasiada agua a la vez después del ejercicio, reducirá el contenido de sal en la sangre. Si el contenido de sal se reduce a un cierto nivel, los iones de sodio en el cuerpo se desequilibrarán, aumentando la presión osmótica entre las células y los tejidos, provocando calambres musculares.
En definitiva, es cierto que la vida está en el ejercicio. El ejercicio puede prolongar la vida, pero debes prestar atención a la forma de realizar el ejercicio y partir de tu propia situación, para lograr el propósito del ejercicio y. salud.
Son muchos los beneficios de caminar y hacer ejercicio, pero también hay formas y medios de evitar pisar escollos perjudiciales para la salud y que hacen que tu cuerpo esté cada vez mejor.