Comer dos o tres pepinos de mar a la semana durante el confinamiento es beneficioso para el organismo. 1. Los pepinos de mar son ricos en ácido fólico y una variedad de aminoácidos, que pueden mejorar la inmunidad materna, promover el metabolismo corporal y reducir la presión arterial y los lípidos en sangre. En segundo lugar, los pepinos de mar también tienen el efecto de reponer la sangre y promover la producción de sangre, y tienen un buen efecto para mejorar la anemia posparto, los mareos y la debilidad de las extremidades. Durante el período de encierro, el tratamiento dietético debe organizarse activamente en función de la condición física. Generalmente, puedes comer pepinos de mar una semana después del parto. Los pepinos de mar son ricos en valor nutricional y beneficiosos para la recuperación del organismo de la madre. El pepino de mar tiene las funciones de regular la inmunidad, nutrir el yin y la sangre y retrasar el envejecimiento. , pero no se recomienda consumir dentro de una semana después del parto. Además, es necesario prestar atención para evitar esfuerzos excesivos después del parto, prestar más atención al descanso y no quedarse despierta hasta tarde para resfriarse. Mantenga el perineo limpio e higiénico en momentos normales y evite tener relaciones sexuales demasiado pronto, de lo contrario puede causar fácilmente una infección. En cuanto a la dieta, come más alimentos ligeros y fáciles de absorber, incluidas más frutas y verduras frescas.
Debes descansar en casa después de dar a luz, prestar atención al sueño y no volver a cansarte, pero no quedarte en cama durante todo el mes. Generalmente, puedes levantarte de la cama y realizar algunas actividades ligeras 3 días después del parto. En el segundo mes conviene insistir en realizar ejercicio físico adecuado y hacer algo de gimnasia posparto o yoga, que nos puede ayudar a recuperar la forma lo antes posible. A partir del segundo día después del parto, podrás peinarte, cepillarte los dientes y enjuagarte la boca. Pero trate de no entrar en contacto con agua fría. Puedes utilizar agua hervida como hojas de artemisa, Mijo Spatholobus o cáscara de jengibre para bañarte y lavarte el cabello. Mantenga limpias las manos y los pezones, especialmente el perineo. Puedes comer frutas y verduras. Si tienes miedo al frío, come menos frutas frías como la sandía y el plátano. La dieta materna debe incluir comidas pequeñas y frecuentes, con una mezcla de carne y verduras. Se debe poner especial énfasis en la ligereza y la comida debe ser fácil de digerir. Nunca coma en exceso para evitar la sobrenutrición. Durante el período de encierro, la habitación debe ventilarse con frecuencia, pero no debe haber convección entre puertas y ventanas, y no se debe ventilar a la madre y al bebé para evitar resfriarse.