Cuando nací me alimentaron con agua helada.
¡Hanhan, aléjate de ellos!
Las madres primerizas deben alejarse de los alimentos crudos y fríos, como el helado, el agua helada o las frutas y verduras recién sacadas del frigorífico. Estos alimentos pueden afectar la coordinación del qi y la sangre, provocar una mala digestión y absorción e incluso afectar la descarga de la congestión y los loquios.
Picante y excitante, ¡piénsalo dos veces antes de comer!
Las madres primerizas deberían decir adiós a las comidas picantes, como pimientos, puerros, hinojo, alcohol, etc. Estos alimentos pueden aumentar el fuego de tu deficiencia y causar problemas como llagas, estreñimiento e incluso hemorroides. Para empeorar las cosas, estos alimentos irritantes también pueden afectar a los bebés a través de la leche, haciéndolos "enojar" también.
¡La alimentación no es la panacea!
Las madres primerizas deben tener en cuenta que los alimentos complementarios no son una panacea. Una suplementación adecuada ayuda a la recuperación, pero una suplementación excesiva puede ser perjudicial para la salud. El físico de cada persona es diferente y sus necesidades nutricionales posparto también son diferentes. Por ello, las madres primerizas deben elegir una dieta adecuada a su condición física.