¿A qué debes prestar atención al comer en invierno?
Los suplementos tónicos en invierno deben tomarse paso a paso. Puede comer papilla para ayudar a restaurar la función gastrointestinal. Está prohibido tomar suplementos grandes o severos, como ginseng, asta de terciopelo, tortuga de caparazón blando, gelatina de piel de burro y otros alimentos grasosos y gastrointestinales. Un uso inadecuado puede provocar fácilmente indigestión, llagas en la boca y lengua, estreñimiento, etc. Se recomienda que los pacientes con constitución débil o enfermedades crónicas tomen suplementos razonables bajo la supervisión de un médico.
1. Consuma más alimentos calientes: como carne de res, cordero, jengibre, etc. En invierno, el clima es más frío. Comer más alimentos calientes puede reponer la energía que necesita el cuerpo a tiempo y también lograr el efecto de disipar el frío.
2. Evita comer alimentos ricos en calorías: como carnes grasas, patatas fritas, hamburguesas, etc. Si consume estos alimentos en invierno, puede provocar que el calor se acumule en el cuerpo, provocando obesidad.
3. Frutas y verduras: Generalmente, en invierno se pueden comer algunas frutas y verduras, como manzanas, kiwis, pitahayas, tomates, etc. No solo puede reponer la energía que necesita el cuerpo, sino que también promueve la peristalsis del tracto gastrointestinal y previene los síntomas de estreñimiento en invierno.
Consume más alimentos que contengan VB2, VA y VC.
El clima frío refuerza la función oxidativa del organismo, y el metabolismo vitamínico del organismo también sufre cambios importantes. La vitamina B2 (riboflavina) debe complementarse en la dieta a tiempo para prevenir la aparición de estomatitis angular, queilitis, glositis y otras enfermedades. La vitamina B2 existe principalmente en el hígado de los animales, los huevos, la leche, los frijoles y otros alimentos. La vitamina A puede mejorar la resistencia del cuerpo al frío, así que coma más alimentos ricos en vitamina A, como hígado, zanahorias, calabazas, batatas, etc. La vitamina C puede mejorar la capacidad del cuerpo para adaptarse al frío y tiene un buen efecto protector sobre los vasos sanguíneos. Preste atención a la ingesta de verduras y frutas frescas.
En definitiva, las precauciones para una alimentación saludable en invierno son comer en la medida de lo posible alimentos calientes, evitar alimentos ricos en calorías, comer más frutas y verduras, etc. En invierno, se puede comer cordero, ternera, longan, sésamo negro, pollo, cordyceps, ñame, raíz de loto, nueces, etc. con moderación.