¿Qué pueden comer las mujeres embarazadas después de una cesárea?
¿Qué es bueno comer después de la cesárea y el parto? Después de la operación, debido a que la condición física de la mujer embarazada aún se está recuperando, es necesario despejar los intestinos. Por lo tanto, en la primera semana, lo mejor es que las mujeres embarazadas coman principalmente papilla. Puedes beber una taza de agua de rábano el primer día y gachas de arroz seis horas después del parto. Cuando los flatos intestinales continúen hasta el día siguiente, se puede beber unas gachas de mijo de forma adecuada. Luego, puedes comer sopa de carpa cruciana y fideos de forma adecuada.
En cuanto a qué comer después de la cesárea, el organismo de las mujeres embarazadas se ha ido recuperando paulatinamente en la segunda semana. En este momento, es necesario que entren correctamente en la colcha. Si quieres nutrir los riñones y la sangre, puedes comer sopa hecha con frijoles, dátiles rojos y carpa cruciana. Si quieres nutrir el yin y la sangre, puedes beber sopa de pollo con carne de cerdo desmenuzada y trozos de bambú. Además, si añades cantidades adecuadas de dátiles rojos a la Codonopsis pilosula y al pollo con huesos negros, la sopa quedará más nutritiva.
2. Recomendaciones dietéticas tras una cesárea
Lo que los Amigos Cristianos llaman domingo
Una taza de agua de zanahoria, una taza de agua hervida y gachas de arroz.
Seis horas después de la cesárea, la madre sólo puede comer después de que sus intestinos estén vacíos.
Al día siguiente
Mañana: Puedes preparar tú mismo gachas de mijo o lavar los huevos con agua hirviendo. Es nutritivo y sabe muy bien.
Mediodía: Gachas de mijo o fideos podridos. La sopa de fideos se puede preparar como sopa de carpa cruciana.
Por la noche: gachas de arroz blanco (agregue unas hojas de lechuga), sopa de rábanos, huevos fermentados (agregue un poco de azúcar moreno, que se usa para eliminar los loquios).
Tercer día
Mañana: gachas de arroz blanco (mezcladas con un poco de mijo), una bola de masa de arroz con arroz fermentado (sin relleno de carne, tiene el efecto de abrir la leche).
Mediodía: Gachas de arroz blanco (mezclado con un poco de mijo).
Noche: Gachas de arroz blanco (mezclado con dátiles rojos), plumas de pollo salteadas.
Las mujeres que han tenido una cesárea deben prestar atención a una dieta ligera después de la operación para evitar alimentos grasosos que irritarán los intestinos y provocarán una mala recuperación en las últimas etapas del embarazo. Por supuesto, también conviene prestar atención a añadir algunas sopas más nutritivas para ayudar a las madres embarazadas a destetar y recuperarse.