¿Se puede comer avena y trigo sarraceno durante el confinamiento?
No sólo durante el segundo mes, sino también en la alimentación básica diaria, siempre se deben ingerir cantidades adecuadas de cereales integrales, judías y patatas.
Sin añadir calorías adicionales, el valor nutricional de estos cereales integrales es mucho mayor que el de los fideos de arroz blanco pulido que se consumen habitualmente, y pueden utilizarse en alimentos básicos para mejorar el valor nutricional de los alimentos básicos.
Cereales: avena, trigo sarraceno, cebada, mijo, arroz negro, arroz integral, sorgo, etc. Frijoles varios: frijoles rojos, frijoles mungos, frijoles rojos, habas, etc. Patatas: batatas, patatas moradas, malanga, patatas, etc.
El betaglucano de la avena es bueno. Es una fibra dietética soluble que tiene un buen efecto para retrasar el azúcar en sangre posprandial, reducir el colesterol y los triglicéridos en sangre y prevenir la obesidad. También tiene un mayor contenido de fibra insoluble que el arroz blanco refinado, lo que puede proteger contra el cáncer de intestino.
Puedes cocinar gachas solo con avena, o puedes cocinarlas con arroz blanco, o puedes cocinar el arroz al vapor con el arroz primero y luego volver a cocinarlo al vapor. Si haces papilla, cuanto más pegajosa mejor, esa es la función del betaglucano.
¿Puedo comer fruta durante el confinamiento?
Las verduras y frutas son alimentos muy comunes y son alimentos imprescindibles en el día a día.
Durante el proceso del parto, la madre consume mucha energía y sus músculos abdominales se relajan. Además, permanecer mucho tiempo en cama reduce la cantidad de ejercicio, lo que provoca un peristaltismo intestinal lento y propensión al estreñimiento. Al mismo tiempo, aumenta el metabolismo materno, aumenta la cantidad de sudor y orina y es más probable que se produzcan heces secas. Las frutas y verduras contienen una variedad de vitaminas, fibra dietética, ácidos orgánicos, etc. , puede promover la recuperación de la función intestinal, estimular el apetito, promover la digestión y absorción del apetito y prevenir el estreñimiento.
Por otro lado, si no se comen frutas y verduras y no se suplementan los nutrientes necesarios, la madre no sólo será propensa a sufrir deficiencias nutricionales relacionadas, sino que también afectará a la secreción de leche materna y el crecimiento y desarrollo del bebé.