¿Qué nódulos tienen más probabilidades de volverse cancerosos? ¿Cómo prevenirlo?
Pero conviene recordar que no todos los nódulos pequeños son cáncer de pulmón. Hay dos causas principales de los nódulos pequeños. La primera es la inflamación y la infección y la segunda son los tumores. Entre las infecciones inflamatorias, las infecciones pulmonares específicas más comunes incluyen la tuberculosis y las bolas de hongos pulmonares. Entre las infecciones no específicas, la más común es la infección bacteriana general, que es lo que solemos llamar neumonía. Entre los nódulos pulmonares neoplásicos, el más común es el cáncer de pulmón, un tumor maligno, y existen otros tumores benignos, como hamartomas, hemangiomas, pseudotumores inflamatorios, etc.
En el hospital se realizan muchos exámenes de tiroides mediante cirugías de tiroides todos los días. Algunos nódulos no son buenos y se considerarán malignos. Para los nódulos tiroideos malignos, las manifestaciones clínicas suelen ser las siguientes: 1. Agrandamiento rápido de los nódulos tiroideos en un corto período de tiempo; 2. Acompañado de ronquera, dificultad para respirar y dificultad para tragar 3. Agrandamiento significativo de los ganglios linfáticos cervicales; Diarrea evidente. Los pacientes con enrojecimiento facial y enrojecimiento facial deben estar alerta ante la posibilidad de cáncer medular de tiroides.
La ecografía Doppler color puede distinguir nódulos tiroideos benignos y malignos. La ecografía suele clasificar los nódulos tiroideos. En términos generales, los niveles 1 y 2 no son problemas graves y se consideran benignos. Prestaremos atención al grado 3, y el grado 4 se divide en abc, y la proporción de malignidad aumenta gradualmente. La malignidad de bajo grado incluye nódulos isoecoicos sólidos o nódulos hiperecoicos o nódulos sólidos quísticos con ecos excéntricos sólidos. Los ecos sólidos no tienen características malignas. La malignidad de alto grado incluye uno o más signos de malignidad basados en una malignidad moderada, como calcificación, irregularidad en el nódulo y una relación de aspecto mayor que 1.
Por supuesto, la ecografía no solo debe observar los nódulos tiroideos, sino también los ganglios linfáticos que rodean los nódulos malignos. Debido a que el tumor invade los ganglios linfáticos, los ecos internos pueden volverse mixtos, a veces quísticos o incluso completamente quísticos. Los cambios quísticos indican invasión tumoral y son más comunes en niños y pacientes jóvenes. Otra característica de la invasión de los ganglios linfáticos es la pérdida del suministro de sangre al hilio del ganglio linfático.