¿Qué verduras son buenas para la salud?
La espinaca también se llama espinaca y la hierba persa. Utilice hojas y tallos tiernos como alimento. La espinaca es originaria de Irán y se cultivaba hace 2.000 años. Posteriormente se extendió al norte de África y de los árabes a Europa occidental, España y otros países. Las espinacas se cultivaban en China ya en la dinastía Tang. Los tallos y las hojas de las espinacas son suaves, tiernos y deliciosos, y son ricos en vitamina C, caroteno, proteínas, hierro, calcio, fósforo y otros minerales. Además de las verduras frescas, también se pueden deshidratar, secar y congelar. Las espinacas contienen altas cantidades de betacaroteno y hierro, y también son una excelente fuente de vitamina B6, folato, hierro y potasio. Entre ellos, el hierro rico puede mejorar la anemia por deficiencia de hierro y hacer que las personas luzcan sonrosadas y radiantes, por lo que se lo conoce como producto de belleza.
Las hojas de espinaca contienen cromo y una sustancia similar a la insulina, que es muy similar a la insulina y puede mantener estable el azúcar en sangre. Rica en vitamina B, puede prevenir la aparición de deficiencias vitamínicas como la estomatitis angular y la ceguera nocturna. Las espinacas contienen una gran cantidad de antioxidantes, como la vitamina E y el selenio, que tienen efectos antienvejecimiento y de proliferación celular. No sólo activa la función cerebral, sino que también mejora la vitalidad juvenil y ayuda a prevenir el envejecimiento cerebral y la enfermedad de Alzheimer. Un estudio de la Universidad de Harvard también encontró que las personas de mediana edad y mayores que comen espinacas de 2 a 4 veces por semana pueden reducir el riesgo de degeneración de la retina al tomar vitamina A y caroteno, protegiendo así la visión.