¿Qué es el dolor de garganta?
El dolor de garganta es causado principalmente por inflamación. En primer lugar, la faringitis aguda es el síntoma clínico más común y se manifiesta principalmente como dolor de garganta, picazón seca, sensación de ardor, sensación de cuerpo extraño, tos y otros síntomas. La siguiente es la amigdalitis aguda, que se caracteriza principalmente por un dolor de garganta intenso, que se agrava al tragar y, a menudo, se irradia con dolor de oído. El examen local muestra que las amígdalas están hinchadas y congestionadas, y hay una secreción purulenta en la superficie. La segunda es la epiglotitis aguda, que se manifiesta principalmente como dolor de garganta repentino, empeoramiento al tragar, dificultad para tragar, como comida en la boca, negativa a comer y dificultad para respirar. Esta situación requiere tratamiento hospitalario inmediato. Por último, algunas enfermedades, como los cuerpos extraños en la garganta y los tumores malignos de la garganta, también pueden provocar dolor de garganta. Por tanto, si tienes dolor de garganta, lo mejor es acudir al departamento de otorrinolaringología del hospital para diagnóstico y tratamiento sintomático. Hay muchas causas del dolor de garganta, incluido el calor excesivo, fumar y beber, la inhalación de gases nocivos, faringitis, infección del tracto respiratorio superior, traumatismos, etc. Los pacientes con dolor de garganta pueden acudir al departamento de otorrinolaringología del hospital para ser examinados. Si se encuentra enrojecimiento e hinchazón, se puede realizar un análisis de sangre de rutina para determinar si existe una infección bacteriana. Si el paciente tiene el hábito de fumar y beber, debe intentar dejar de fumar y beber, beber más agua en horarios habituales y no quedarse despierto hasta tarde. Puedes incorporar un poco de sopa de pera blanca y hongos blancos en tu dieta para reducir el fuego, y también podrás controlar tus emociones y evitar cambios de humor frecuentes. Consuma más alimentos ligeros y no irritantes para asegurarse de que el aire interior sea fresco y húmedo y de no trabajar demasiado.