¿Cómo distinguir varios tipos de rinitis?
Existen muchos tipos de rinitis, entre ellas la rinitis aguda, la rinitis crónica, la sinusitis, la rinitis atrófica, la rinitis seca, etc. El tabaco también tiene diferentes manifestaciones, entre ellas secreción nasal mucopurulenta, secreción nasal acuosa, secreción nasal pegajosa, secreción nasal purulenta y secreción nasal sanguinolenta.
1. Secreción nasal acuosa clara: La secreción nasal acuosa clara es una mezcla de desbordamiento vascular y moco, que contiene una pequeña cantidad de glóbulos rojos, células exfoliadas, bacterias y mucina. Es más común en la etapa inicial de la rinitis aguda, es decir, la etapa inicial de un resfriado. Cuando la rinitis alérgica se encuentra con una sustancia alérgica, inmediatamente saldrá una secreción nasal acuosa, que puede ir acompañada de estornudos continuos; si se elimina la sustancia alérgica, se curará de inmediato;
2. Secreción nasal mucopurulenta: en la etapa tardía de la rinitis aguda, la secreción nasal cambia de agua a moco. En el período de recuperación, las células epiteliales mucosas y los leucocitos multinucleados mezclan el moco y se convierten en secreción nasal mucopurulenta.
3. Secreción nasal purulenta: Es común cuando la sinusitis crónica dura mucho tiempo y el alcance de la inflamación y erosión es grande. La sinusitis maxilar aguda tiene secreción nasal purulenta de color amarillo y la sinusitis maxilar crónica grave tiene secreción nasal purulenta acuosa con mal olor. Después de mucho tiempo, el niño tiene secreción nasal y mal olor.
4. Secreción nasal mucosa: El líquido secretado por la cavidad nasal en circunstancias normales es moco. Pero en circunstancias normales, no fluirá activamente. Si sale mucha mucosidad por la nariz, muchas veces es causada por cambios emocionales como sorpresa excesiva, tristeza, llanto, etc. Además, cuando la cavidad nasal está sujeta a algún estímulo físico o inflamación, la mucosidad nasal aumentará y fluirá.
5. Hemorragias nasales: A menudo hay vetas de sangre en la nariz, o hemorragias nasales en sí, especialmente hemorragias nasales crónicas o intermitentes de larga duración, a las que se debe prestar más atención. Esto es más común en rinitis aguda, rinitis atrófica, cálculos nasales, granuloma nasal, cuerpos extraños nasales, úlceras, tumores malignos, etc. Por ejemplo, la sangre en la nariz y los vómitos orales suelen ser síntomas tempranos del cáncer de nasofaringe. Debe estar atento y acudir al hospital lo antes posible.