¿Puedo comer oro sin intercambiarlo mientras estoy amamantando?
En el pensamiento tradicional, la sopa de pollo es rica en nutrientes y es un buen producto para nutrir el organismo. Es más indicado para que las mujeres embarazadas lo tomen durante el período de recuperación del parto. La sopa de pollo incluso ha sido dotada de funciones poderosas como promover la lactancia, reponer el qi y reponer la sangre. Sin embargo, ¿es realmente así?
Los peligros de beber sopa de pollo después del parto;
1. Hace que las nuevas madres "vuelvan a la leche"
Las gallinas contienen una gran cantidad de estrógeno, lo cual es perjudicial para las mujeres embarazadas por nacer. Dicho esto, es realmente un buen complemento. Pero para las mujeres parturientas, tomar grandes cantidades de estrógeno no solo no tendrá un efecto nutritivo, sino que también afectará la secreción de prolactina en la parturienta, lo que provocará una disminución de la leche materna.
2. Conducir a la obesidad materna
Algunas amigas de mi entorno controlaban muy bien su peso cuando estaban embarazadas, pero cuando regresaron de la baja por maternidad, estaban completamente fuera de forma. Es porque como demasiado durante la lactancia. Así, la sopa de pollo es extremadamente nutritiva y contiene muchas proteínas y grasas. El consumo frecuente de sopa de pollo conducirá inevitablemente a la sobrenutrición y la obesidad materna.
3. Provocar indigestión en los bebés.
El consumo frecuente de sopa de pollo no sólo provocará obesidad, sino también un contenido excesivo de grasa en la leche. El sistema digestivo de los recién nacidos aún no está maduro y comer una gran cantidad de grasas puede provocar problemas gastrointestinales como indigestión en los niños.
Consejo clave: Si una madre lactante quiere amamantar, lo mejor es elegir un gallo grande, porque los gallos no sólo no utilizan muchos estrógenos, sino que además tienen mucha menos grasa que las gallinas.
¡Espero que mi respuesta te pueda ayudar!