¿Cuáles son las verduras con alto contenido de plomo?
Eliminación efectiva del plomo: En primer lugar, ingiera más alimentos ricos en vitamina C. Puede comer más frutas ácidas, como limones, granadas, espinos, kiwis, etc., especialmente azufaifa. Las manzanas, las fresas, los pimientos frescos, el repollo y los tomates también contienen vitamina C.
En segundo lugar, come más alimentos ricos en proteínas y hierro. Las proteínas y el hierro pueden reemplazar al plomo y combinarse con la materia orgánica en los tejidos para acelerar el metabolismo del plomo. Dé a los niños más huevos, leche y carne magra.
El tercero es complementar con alicina. La alicina del ajo puede combinarse con el plomo para formar compuestos no tóxicos.
En el mundo actual, el plomo está ampliamente presente en el medio ambiente y en las necesidades diarias, y las personas tienen muchas oportunidades de estar expuestas al plomo. Se puede decir que la gente vive en un "gran mundo de plomo". El plomo en los gases de escape de los automóviles, en las pinturas, en los vajillas, en los útiles escolares y en los juguetes, y en los alimentos, está omnipresente. El plomo es el más dañino para los niños, porque los bebés y los niños pequeños tienen la costumbre de morderse los dedos, los juguetes y los útiles escolares. Además, les gusta comer bocadillos que contienen plomo, como las palomitas de maíz. El plomo que contienen estos artículos puede absorberse. hasta el 76%. Según las mediciones, cuando el contenido de plomo en la sangre humana supera los 30 microgramos/100 ml, se producirán síntomas como mareos, dolores musculares y articulares, insomnio, anemia, dolor abdominal, menstruación irregular, abortos espontáneos y abortos espontáneos. Si el nivel de plomo en la sangre de un niño supera los 20 μg/100 ml, además de los síntomas anteriores, se producirán síntomas como hiperactividad, falta de atención, falta de apetito, micción frecuente y enuresis, dificultad para defecar, llanto frecuente, función inmune baja y coeficiente intelectual bajo. Las últimas investigaciones de la Universidad de Rochester en Estados Unidos muestran que la contaminación por plomo también puede afectar la secreción de saliva.