Red de conocimientos sobre prescripción popular - Conocimiento de perdida de peso - ¿Qué debo hacer si un cangrejo se me atasca en la garganta?

¿Qué debo hacer si un cangrejo se me atasca en la garganta?

Cuando el caparazón del cangrejo se atasca en la garganta, no trague con fuerza, no coma alimentos duros ni beba vinagre. Esto puede dificultar la deglución y también puede hacer que el caparazón del cangrejo sea más profundo y más difícil de quitar. En este caso, el caparazón del cangrejo puede incluso rayar el esófago. Puedes intentar tomar una pastilla para la garganta para evitar la irritación provocada por la comida picante. Si el malestar aún no se alivia, debe acudir al departamento de otorrinolaringología de un hospital habitual para un examen y tratamiento a tiempo. Un médico profesional utilizará un laringoscopio indirecto o un laringoscopio electrónico para examinar cuidadosamente la laringe. Si se encuentra un objeto extraño, lo retirarán con cuidado para evitar daños e infecciones en la mucosa de la garganta y los vasos sanguíneos.

Los caparazones peludos de los cangrejos generalmente no son comestibles.

Si accidentalmente te comes el caparazón del cangrejo, no te preocupes demasiado. No es fácil tener grandes problemas. Debido a que la sustancia clave en el núcleo del cangrejo peludo es el calcio y hay una gran cantidad de jugo gástrico de alta concentración en el estómago humano, el solvente orgánico en el caparazón del cangrejo eventualmente desaparecerá. No es fácil causar daños a la salud de las personas, por lo que no hay que preocuparse demasiado por ello. Ningún problema.

Aproximadamente 3/4 del caparazón del cangrejo es bicarbonato de calcio, aproximadamente la mitad del 1/4 restante es quitina y el resto es proteína. La quitina se elabora a partir de la N-acetilglucosamina azucarada y es insoluble en ácidos y bases diluidos. Si se cocina con ácido, se hidrolizará en ácido fórmico y D-glucosamina. La quitina es un componente único de los caparazones como los cangrejos y los camarones, pero también se encuentra en los caparazones, hongos y esporas de algunos insectos.