Es mejor dormir en una cama dura o blanda durante el confinamiento. ¡El secreto está aquí!
La idea que nos han inculcado las camas duras desde pequeños es que las camas duras pueden ayudar a moldear el cuerpo y equilibrar la columna. Debido a su buen soporte, la cama dura puede permitir que los músculos de la espalda descansen. Parece ser beneficiosa para las madres que acaban de dar a luz y necesitan remodelar su cuerpo con urgencia para restaurar su forma corporal perfecta anterior. También es adecuada para los pacientes. con dolor de espalda diario. Si la madre tiene sobrepeso, una cama dura no hará que la columna se doble. Sin embargo, las camas duras también tienen muchas desventajas, es decir, no es muy cómodo dormir en ellas, porque la cama dura no puede sentir la suavidad del cuerpo en absoluto, lo que afecta el sueño y afecta el sueño de las mujeres embarazadas. Si la madre es demasiado delgada, le provocará dolor de espalda y sensibilidad en los huesos. Por lo tanto, no elijas una cama demasiado dura durante el confinamiento.
Cama Blanda La cama blanda es realmente suave, cómoda, suave y elástica, lo que favorece mucho el sueño materno. Sin embargo, las camas blandas pueden tener fácilmente efectos adversos en la salud materna. Ha habido varios casos uno tras otro, todos provocados por mujeres embarazadas que dormían en camas blandas, como luxación de la articulación sacroilíaca y separación de la sínfisis púbica. Debido a que el cuerpo de la madre secreta relaxina después del parto, la estabilidad pélvica no es muy buena y se vuelve blanda. Si duerme en una cama muy blanda en este momento, le resultará difícil levantarse y una fuerza excesiva puede dañar la pelvis. Las mujeres con sobrepeso son propensas a sufrir lesiones en los nervios espinales y sus cabezas y nalgas pesan demasiado, lo que las cansa mucho al dormir.
Elección correcta En resumen, no elijas una cama ni demasiado dura ni demasiado blanda. Debes elegir una cama que sea blanda y dura. Coloque una almohadilla de algodón suave de 10 cm de grosor sobre una cama de madera normal. Las almohadillas de algodón suaves pueden ayudar al cuerpo a mejorar sus curvas y mantener normal la curvatura fisiológica del cuerpo, lo que es beneficioso para la recuperación y el sueño. Elegir una cama se trata principalmente de elegir una cama donde una persona pueda estirarse libremente y tener la misma presión. Además de la dureza, también hay que prestar atención a la altura de la cama. No debe ser demasiado alta porque la madre acaba de recuperarse y no es muy cómodo levantarse de la cama, por lo que se debe mantener la altura. a cuarenta o cincuenta centímetros. De esta forma, podrás ponerte las pantuflas directamente al levantarte de la cama y no te costará mucho esfuerzo acostarte en la cama. Lo más importante para las madres es mantener un tiempo de descanso adecuado después del parto, dormir más de ocho horas al día y realizar más actividades de recuperación para ayudar a la recuperación.