¿Qué debo hacer si no puedo defecar mientras estoy sentado en el inodoro?
Si no puedes defecar estando sentado, puedes optar por medicación y fisioterapia como tratamiento. Debido a las características de la estructura fisiológica del cuerpo humano, ponerse en cuclillas facilita la defecación. En segundo lugar, cambiar el entorno de vida y que los pacientes se acostumbren a ponerse en cuclillas puede causar dificultades para defecar cuando están sentados.
Es posible que todavía tengas un poco de estreñimiento. Necesita beber más agua, comer más frutas y verduras con alto contenido de fibra y hacer ejercicio moderado. No se preocupe demasiado. Puede elegir preparaciones laxantes externas para el tratamiento. , como abrir un tapón vaginal, insertar una pastilla de jabón en el ano y lavar el ano con agua tibia y jabón pueden tener un efecto laxante.
Al mismo tiempo, también puedes masajear tu abdomen en el sentido de las agujas del reloj cuando estés libre. Este método puede ayudar a favorecer la peristalsis intestinal y así favorecer la defecación. Si realmente no puede defecar después de sentarse, puede reemplazarlo con un inodoro. Después de todo, una defecación suave es muy importante.
Causas de la incapacidad para defecar:
1. El estreñimiento significa que la frecuencia de defecación se reduce. El número de deposiciones es inferior a dos veces al día o solo una vez cada tres días. La cantidad de heces es relativamente pequeña y seca, esto es estreñimiento.
2. Las hemorroides son una enfermedad anorrectal común. El plexo venoso del paciente debajo de la mucosa del recto y debajo de la piel del canal anal se flexiona o expande, formando una masa venosa relativamente blanda. enfermedad. . Los pacientes experimentarán sangrado después de defecar, masas alrededor del ano, dolor intenso durante la defecación, dificultad para defecar, estreñimiento habitual y hemorroides externas trombóticas.
3. La aparición de la colitis es relativamente lenta y la gravedad de la enfermedad varía. Los pacientes tendrán dolor abdominal y diarrea, pus, sangre o mocos en las heces e incluso heces secas y duras. No podré defecar durante varios días. A veces habrá diarrea, a veces estreñimiento, acompañado de pérdida de peso corporal, debilidad general y ataques recurrentes.