No comer puerros durante el confinamiento

Se recomienda comer menos puerros en el segundo mes. El consumo excesivo puede hacer que los bebés se enojen fácilmente. Debido a diferencias individuales, algunas mujeres pueden recaer.

La comida de confinamiento es principalmente ligera, y los puerros son comida picante. Además, comer más puerros también puede provocar que la madre vuelva a lactar, por lo que debe comer menos.

Durante el confinamiento, las madres deben prestar especial atención a su alimentación. Además de garantizar la nutrición, el sabor también debe ser ligero. No ingerir alimentos fríos, picantes, irritantes o que puedan provocar la lactancia. Las mujeres embarazadas pueden beber más sopa de pescado y sopa de costillas de cerdo para aumentar el suministro de leche. Al mismo tiempo, esta sopa es rica en nutrientes y beneficiosa para la recuperación del organismo de la madre. Desde la perspectiva de la medicina tradicional china, los puerros son un alimento picante. Si se consume en grandes cantidades, no favorece la recuperación del organismo de la madre. Además, puede provocar que el bebé amamantado se enfade. Además, puede volver a la leche y tomarse en pequeñas cantidades. A la hora de comer intenta cocinarlo lo mejor posible.

Durante el confinamiento, las madres no sólo deben prestar atención a su alimentación, sino también observar la descarga de loquios. Si los loquios han estado sucios durante mucho tiempo o si tiene dolor abdominal, debe retirarse inmediatamente.