Cómo aliviar la fiebre durante la lactancia

Cuando una madre está amamantando y su temperatura corporal se mide entre 38°C y 40°C, tiene fiebre. Una vez que aparece fiebre, se deben tomar algunas medidas para aliviar los síntomas. Asegurar el descanso

Una vez que se presenta fiebre, primero se debe asegurar una cierta cantidad de descanso y dormir lo suficiente. Lleva una dieta ligera

Presta atención a reponer suficiente agua y asegúrate de beber 500 ml de agua tibia todos los días, que son al menos dos tazas. También es necesario prestar más atención a las tres comidas. El alimento básico debe consistir principalmente en alimentos líquidos ligeros, como fideos y gachas, complementados con frutas frescas. No es aconsejable comer en exceso en cada comida. Lo mejor es realizar comidas pequeñas con frecuencia. Presta atención a la lactancia materna

La fiebre es una forma que tiene el cuerpo de protegerse hasta cierto punto, no te apresures a reducir la fiebre a ciegas. Si aún se encuentra en la etapa de lactancia, se recomienda que la mujer deje de amamantar temporalmente dos días antes de tener fiebre. Durante el período de lactancia, preste atención a la extracción de leche para evitar afectar la lactancia posterior. Enjuagar con agua salada

Se recomienda utilizar agua salada al hacer gárgaras después de las comidas. Lo mejor es inclinar ligeramente la cabeza para que la faringe también se pueda limpiar más una vez por la mañana y por la noche. Elimina eficazmente las bacterias en la boca. Remoja tus pies en agua caliente

Remoja tus pies en agua lo suficientemente caliente antes de acostarte todos los días. La temperatura del agua debe ser la más alta que puedas soportar sin quemarte. Sigue remojando tus pies durante quince minutos. Al remojar los pies, la superficie del agua debe exceder el empeine. Lo mejor será que la piel de los pies se enrojezca después de remojarlos. Comer cebolletas crudas

Cortar las cebolletas en tiras, cocinar el aceite y verterlo sobre las cebolletas. Agregar una cantidad adecuada de tofu u otros platos que se puedan comer fríos y servir frío. Buen gusto y buen efecto preventivo. Masajear el surco nasal

Frotar las palmas de las manos para calentarlas y luego masajear el surco nasal, repitiendo esto una docena de veces. Puede prevenir eficazmente la fiebre y aliviar los síntomas de congestión nasal después de la fiebre.