No te resfríes con el viento durante el encierro, de lo contrario, ¿qué enfermedades te afectarán fácilmente?
No te resfries durante el confinamiento. Muchas madres usan sombreros o pañuelos en la cabeza durante el parto para reducir la posibilidad de que se les enfríe la cabeza. Una vez que ocurre la enfermedad de confinamiento, es difícil de tratar. No importa qué parte del cuerpo se resfríe durante el período de confinamiento, afectará la salud del cuerpo y hará que los huesos y ligamentos se relajen, lo que fácilmente puede provocar resfriados o articulaciones. enfermedades. . En segundo lugar, también debes proteger tu cintura. No te canses ni te enfríes. El aire frío entra al cuerpo por la cintura. Luego te dolerá la cintura y te resultará muy incómodo. También debes mantener los pies calientes, usar calcetines y zapatos lunares, lavarte los pies con agua caliente y secarlos a tiempo, y usar calcetines para evitar resfriarte. Si está resfriado, le picarán los pies y le darán calambres.
Pero es inevitable resfriarse durante el confinamiento, por lo que podemos sudar. Hay muchas maneras. Hervir agua de hojas de moxa o usar vino de arroz puede ayudar a las madres a sudar. Personalmente recomiendo hervir agua de hojas de artemisa, que consiste en hervir hojas de artemisa en agua sin agregar agua fría. Esperar a que la temperatura del agua sea de unos 40 grados, limpiar las articulaciones con una toalla constantemente, lavarlas con agua tibia, ponerse ropa y calcetines. , y vete a la cama. Esta noche sudarás muy finamente y te sentirás muy cómodo.
Durante el confinamiento, el cuerpo de la madre está muy débil y necesita controlar sus emociones, mantener una buena actitud y tumbarse lo máximo posible. Apresurarse en las tareas del hogar puede provocar sobregiro y dolor en las articulaciones. Presta atención a tu alimentación durante el confinamiento y no seas goloso y afectes tu organismo. No coma alimentos crudos o fríos. La condición gastrointestinal de la madre es débil y es propensa a resfriarse, lo que puede provocar enfermedades gastrointestinales. La comida picante también puede estimular las contracciones uterinas, lo que no favorece la recuperación de la madre. Además, un mes después del parto es el momento de reparación del útero. Durante este período, el cuerpo excretará loquios, por lo que nunca se debe dormir en la misma cama.