Presentamos los métodos de hidratación en casa más prácticos
2. Beber agua y té. La regulación interna y la nutrición externa son la clave para hidratar la piel. Al llegar a casa, puedes beber unos sorbos de agua tibia aunque no tengas sed. Después de beber agua de esta manera. Después de un cierto período de tiempo, la piel del rostro también puede nutrirse con humedad, aliviando así la sequedad. Si cree que beber agua corriente es especialmente ligero, también puede preparar un delicioso té. El té de miel y limón es una buena opción. Té de limón y miel: corte limones frescos, ponga dos o tres rodajas de limón en la taza, agregue una cantidad adecuada de miel según el gusto personal y finalmente prepare con agua tibia.
3. Comer más frutas. Hay muchas frutas deliciosas y nutritivas con alto contenido de agua. Sandía, naranja, kiwi, tomate, etc. Puede reponer vitaminas y humedad a la piel. Para cuidar tu piel, a menudo puedes poner frutas en casa y comer de forma más consciente. Tu piel también se mantendrá húmeda y flexible.
4. Humedecer la habitación. El ambiente circundante es bueno y húmedo, y la piel no es propensa a la deshidratación ni a la sequedad. Si el aire acondicionado está encendido en casa en verano, puedes poner un humidificador en el dormitorio o cultivar algunas plantas verdes que ayudarán a mejorar la calidad del aire. A medida que aumenta la humedad del aire, la piel se vuelve más hidratada.