¿Qué hacer después de vomitar sangre?

Después de una hemorragia gástrica, es necesario comprobar la extensión del sangrado. Si la cantidad de sangrado es pequeña, inferior a 200 ml, generalmente no habrá sangrado. La principal manifestación del sangrado es la melena o sangre oculta en heces positiva. Sin embargo, si el volumen de sangrado del paciente alcanza más de 200 ml en un corto período de tiempo, se producirán vómitos frecuentes de sangre debido a la estimulación del tracto gastrointestinal por la sangre. En este momento, los pacientes suelen estar acompañados de una deficiencia del volumen sanguíneo sistémico o incluso un shock hemorrágico. Las manifestaciones clínicas comunes incluyen palpitaciones, fatiga, sudoración, mareos y flema negra.

La hematemesis se refiere al vómito de sangre del paciente, que es causado principalmente por un sangrado agudo en el tracto gastrointestinal superior, pero también puede ser un síntoma causado por ciertas enfermedades sistémicas. En primer lugar debemos descartar hemorragias en la boca, garganta y otras partes del cuerpo. La causa de la enfermedad debe tratarse científicamente. Durante el tratamiento, primero se deben elevar las extremidades inferiores del paciente para evitar la asfixia causada por el reflujo sanguíneo durante los vómitos masivos. Generalmente, primero se debe tomar un tratamiento farmacológico conservador y se deben controlar de cerca los signos vitales del paciente. Si las várices esofágicas se rompen, se puede utilizar vasopresina.

Si vomitas una pequeña cantidad de sangre, debes comprobar si el lugar del sangrado está en la boca y medir tu presión arterial. Si su presión arterial es demasiado alta, puede tomar medicamentos para bajarla y hacer gárgaras con agua salada helada o usar bolas de algodón para comprimirlas y detener el sangrado. Si vomita sangre marrón y se acompaña de malestar abdominal superior o heces negras, debe considerar una hemorragia gastrointestinal superior. En este momento, debe ayunar, no beber nada y enviar a un examen de inmediato. Si el paciente vomita una gran cantidad de sangre y muestra shock, debe acostarse inmediatamente con la cabeza inclinada hacia un lado y ser enviado inmediatamente al hospital. Si se produce vómito con sangre, se recomienda acudir al hospital a tiempo para averiguar la causa.