Cómo curar las úlceras bucales
Las úlceras bucales se pueden tratar con medicamentos orales, medicamentos tópicos y fisioterapia.
Debido a que la causa de las úlceras orales aún no está clara, aunque existen muchos métodos de tratamiento, el efecto curativo no es ideal. En la práctica clínica, el tratamiento local combinado con el tratamiento sistémico puede prolongar el intervalo y acortar el período de ataque. , pero rara vez es eficaz. El principio del tratamiento local es reducir la inflamación, aliviar el dolor y promover la curación. Generalmente se aplican y hacen gárgaras con medicamentos antiinflamatorios, como películas, ungüentos, gárgaras, polvos, etc. Los analgésicos, como la procaína y la lidocaína, se pueden hacer gárgaras antes de las comidas y tienen un efecto analgésico rápido. Para las úlceras persistentes o dolorosas, se pueden realizar inyecciones selladoras submucosas en el sitio de la úlcera. La fisioterapia utiliza láser, onda corta o luz ultravioleta intraoral para reducir la exudación y promover la curación. El tratamiento sistémico se basa en el principio de tratar la causa, reducir la recurrencia y promover la curación. El tratamiento principal es el tratamiento inmunomodulador o acondicionamiento de la medicina tradicional china. Las principales razones para la formación de úlceras orales son: 1. La falta de oligoelementos, como la falta de zinc, hierro, ácido fólico, vitamina B12 y otros oligoelementos y la desnutrición reducirán la función inmune y aumentarán la posibilidad de úlceras orales recurrentes. El virus puede ser el factor iniciador de las úlceras orales, pero no se han encontrado anticuerpos relevantes en el suero de los pacientes y no hay informes de que el virus se haya aislado de tejidos dañados de las úlceras orales. 2. Enfermedades del sistema digestivo y trastornos funcionales. Los pacientes con enfermedades sistémicas son propensos a sufrir úlceras orales, que son causadas principalmente por afectar el sistema inmunológico. Las úlceras bucales están relacionadas con las úlceras gástricas, las úlceras duodenales, la colitis ulcerosa, la enteritis localizada, la hepatitis, etc. Los estudios muestran que entre el 30% y el 48% de las personas con aftas sufren problemas gastrointestinales, como hinchazón, diarrea o estreñimiento. Más del 9% de los pacientes padecen úlceras pépticas.
Se aconseja a los pacientes llevar una dieta ligera, consumir más alimentos ricos en vitaminas y mantener limpia su higiene bucal.