¿Qué debes hacer si te encuentras con un niño desobediente?
A veces un niño es desobediente y no está dispuesto a cooperar con sus padres porque no comprende u olvida las reglas de conducta. Recuérdele al niño nuevamente que puede dejar que sienta y comprenda, pero preste atención a la expresión y el tono. No grite, use un tono firme y gentil para explicarle o hacerle peticiones.
El segundo es dar ejemplo a los niños o adultos que te rodean.
Aunque los niños pequeños conocen las instrucciones y reglas, tienen dificultades para decidir qué hacer. Cuando no actúa y no acepta instrucciones, los padres piensan que el niño es desobediente. Por eso, al mismo tiempo que hacemos saber a los niños las reglas de actuación, también debemos orientarles sobre cómo hacerlo. Por ejemplo, cómo guardar los libros, cómo guardar los juguetes, cómo sentarse, cómo hablar, etc.
El tercero es premiar y elogiar a los niños por su buen comportamiento.
Los niños a menudo son desobedientes para atraer la atención de los padres porque no se han satisfecho sus necesidades. Por lo tanto, los niños a menudo se resisten, desobedecen deliberadamente o gritan para que sus padres cumplan sus deseos.
Los padres deben mantener la calma y no entrar en pánico por el mal comportamiento de sus hijos. Lo mejor que pueden hacer es dejar a sus hijos solos por un tiempo hasta que termine la mierda o su actitud mejore.