Causas y contramedidas de las hemorragias nasales en niños
Infección aguda
Si un niño se resfría, amigdalitis, neumonía o una enfermedad infecciosa como escarlatina o paperas, tendrá fiebre alta. En este momento, los vasos sanguíneos de la mucosa nasal estarán violentamente congestionados e hinchados, y los capilares pueden incluso romperse y sangrar. Esta hemorragia nasal debe ir acompañada de fiebre alta.
Enfermedades hematológicas
Padecer enfermedades de la sangre, púrpura trombocitopénica, anemia aplásica, hemofilia, leucemia, etc. , las hemorragias nasales suelen ser el primer síntoma y los niños presentan hemorragias nasales inexplicables. Los padres deben prestar especial atención en este momento.
Trauma
Los traumatismos leves, como hurgarse la nariz y sonarse la nariz a la fuerza, pueden dañar la "zona de rito" del tabique nasal y provocar hemorragias nasales.
Inflamación
La inflamación local en la cavidad nasal, como la rinitis y la sinusitis aguda y crónica, puede provocar que los vasos sanguíneos de la mucosa nasal se dilaten o se ulceren, provocando hemorragias nasales.
Tumores
Los tumores de la cavidad nasal, los senos paranasales y la nasofaringe son en su mayoría ricos en vasos sanguíneos nuevos. Si hay úlceras, necrosis tisular o infección secundaria, aparecerán hemorragias nasales.
Factores climáticos
El clima seco puede provocar sequedad y costras en la mucosa nasal, lo que puede provocar hemorragias nasales.
Métodos para afrontar la situación
Cuando un niño tiene una hemorragia nasal, los padres deben mantener la calma, pedirle que se siente, inclinar la cabeza ligeramente hacia adelante y limpiar suavemente las fosas nasales con un pañuelo de papel o toalla limpia. No utilizar Pellizcarse la nariz con los dedos. Si las hemorragias nasales son frecuentes, duran mucho tiempo o son causadas por un traumatismo, busque atención médica de inmediato.