No te preocupes si el cuello de tu bebé está inundado. Sigue los pasos a continuación para cuidarlo.
Es un problema común que los bebés tengan el cuello inundado. Siempre que reciban los cuidados adecuados, podrán recuperarse rápidamente. Este artículo le presentará los pasos de atención correctos y esperamos poder ayudarle. Mantenla limpia
Limpia la piel de tu bebé, especialmente los pliegues, y elimina suavemente las secreciones. Aplicar aceites
Puedes utilizar aceite de sésamo, aceite de consuelda o siete hierbas de Yunnan, que tienen un efecto calmante y hacen que el bebé se sienta más cómodo. Evite el uso de talco.
Si la situación de inundación es grave, no utilice talco, porque al exponerse al agua se endurecerá, lo que puede agravar el desgaste de la piel. Presta atención al cuidado diario
Usa un babero y ponle papel higiénico para evitar que la comida o el agua fluyan hacia el cuello. Si fluye, límpielo con agua tibia a tiempo. Cuidado de la piel dañada
Si la piel del cuello del bebé está dañada, primero lávela con agua, luego use yodóforo para desinfectarla y finalmente aplique Smecta para ayudar a la recuperación. Secar y aplicar
Después de la limpieza, humedecer ligeramente con una esponja suave y luego dejar secar. Una vez que tu cuello esté seco, puedes aplicar un poco de aceite de consuelda o aceite de sésamo. Tratamiento de casos graves
Si la descamación de la piel es intensa, para prevenir infecciones se puede utilizar pomada ocular de eritromicina, pero hay que tener cuidado de utilizarla con suavidad para evitar mayores daños en la piel.