¿Cómo hacer papilla de verduras para bebés?
En primer lugar, elige verduras frescas para proteger la salud de tu bebé.
La elección de las verduras es muy importante para las papillas que se preparan para el bebé. Las verduras verdes frescas son ricas en nutrientes. Cuando compre, observe atentamente las hojas de las verduras y elija verduras con hojas intactas, colores brillantes, sin agujeros de gusano y sin signos de descomposición. Las verduras comunes adecuadas para los bebés incluyen espinacas, col china, colza, etc.
En segundo lugar, lava las verduras para eliminar impurezas y restos de pesticidas.
Al lavar verduras, primero remoje las verduras en agua limpia durante 5-10 minutos para permitir que los sedimentos y las impurezas se hunda hasta el fondo. Luego, lava las verduras repetidamente hasta eliminar por completo la suciedad de las hojas. Para evitar el impacto de los residuos de pesticidas en la salud de tu bebé, puedes añadir un poco de sal o bicarbonato de sodio al lavar las verduras, remojarlas y luego enjuagarlas.
En tercer lugar, cortar las verduras facilita que los bebés las masticen y digieran.
Escurrir las verduras lavadas y cortarlas en trozos pequeños. El tamaño de las verduras cortadas depende de la capacidad de masticación del bebé. En términos generales, los bebés más pequeños deben cortarse más finos y los bebés mayores se pueden cortar en partículas un poco más grandes. Las verduras picadas son más fáciles de digerir y absorber para los bebés, evitando problemas como la indigestión.
4. Prepara caldo para añadir un delicioso sabor a las gachas de verduras.
La sopa de gachas de verduras es la clave para determinar el sabor de las gachas. Puedes utilizar huesos de carne fresca, esqueletos de pollo, camarones secos y otros ingredientes para hacer sopa. Al cocinar, agregue una cantidad adecuada de cebolla, jengibre y ajo al gusto, luego baje el fuego y cocine a fuego lento hasta que la sopa esté clara y fragante. Si tienes tiempo suficiente, puedes cocinar el caldo con antelación, guardarlo en el frigorífico y recalentarlo cuando lo utilices.
5. Cuando cocines gachas, controla el calor para resaltar el mejor sabor de las gachas.
Lavar el arroz preparado y ponerlo en una cazuela o arrocera. Vierta el caldo cocido. La cantidad de caldo depende de la cantidad de granos de arroz. Generalmente lo adecuado es que el arroz desborde el caldo 1-2 cm. Después de hervir a fuego alto, baje el fuego y cocine a fuego lento, revolviendo constantemente para evitar que la papilla se pegue a la olla. Cocine hasta que la papilla esté suave y los granos de arroz florezcan, apague el fuego y retire de la olla.
6. Añade verduras verdes picadas para mejorar el valor nutricional y el sabor.
Enfríe la papilla cocida hasta que esté tibia, agregue las verduras verdes picadas y revuelva uniformemente. La adición de vegetales verdes picados no solo aumenta el valor nutricional de la papilla, sino que también mejora el sabor de la papilla. El aroma de las verduras y el delicioso sabor de la papilla se complementan, lo que hace que el bebé tenga mucho apetito y coma con gusto.
7. Consejos íntimos para hacer las gachas verdes más nutritivas y deliciosas.
A la hora de preparar papillas de verduras para tu bebé, no añadas sal ni condimentos para evitar aumentar la carga sobre los riñones de tu bebé.
Según las preferencias de tu bebé, puedes añadir a la papilla de verduras un poco de zanahoria, brócoli y otras verduras para enriquecer la nutrición y el sabor de la papilla.
A medida que tu bebé crece, puedes aumentar gradualmente el tamaño y el tipo de verduras picadas para entrenar la capacidad de masticación de tu bebé.
Las gachas de verduras preparadas deben consumirse lo antes posible y no deben almacenarse por mucho tiempo para evitar el deterioro del sabor o el crecimiento de bacterias.