Las mujeres tienen las manos, los pies y las nalgas frías. ¿Cómo ajustar?
2. Sigue bañándote y remojando los pies. Remoja tus pies en agua caliente todas las noches antes de acostarte. El agua caliente por debajo de 40 está bien. Agregar jengibre o aceites esenciales como manzanilla, canela y romero al agua caliente también puede promover la circulación sanguínea. Remojar los pies en jengibre y vino de arroz es especialmente eficaz. El polvo para baño de pies de artemisa puede aliviar la fatiga, mejorar la circulación sanguínea, promover el metabolismo, eliminar la suciedad, relajar el cuerpo y la mente y sentirse renovado. Agregar polvo para remojar los pies de artemisa no solo puede promover la circulación sanguínea, sino que también absorbe completamente los ingredientes de la medicina tradicional china. Puede masajear los puntos de acupuntura de los pies mientras los empapa a través de la piel. Incluye los resortes, los dedos y los talones del pie. El punto clave es estimular estas partes, lo que ayudará a calentar el útero, promoverá la circulación sanguínea, disipará rápidamente la estasis sanguínea y actuará como analgésico.
3. Las cáscaras de naranja tratan las manos y los pies fríos. Los científicos japoneses han descubierto que la hesperidina extraída de las cáscaras de naranja y añadida al agua potable puede mejorar significativamente las manos y los pies fríos de las mujeres.
4. Toma más vitamina E: La vitamina E puede dilatar los vasos sanguíneos periféricos y es muy útil para una buena circulación de los vasos sanguíneos periféricos. Sin embargo, la vitamina E actúa lentamente y tarda 3 meses en hacer efecto. Tomar 210-250 UI al día es suficiente.
5. Consume más alimentos que contengan niacina: La niacina es muy útil para estabilizar el sistema nervioso y el sistema circulatorio, y también puede mejorar el nerviosismo, la diarrea tensional y la dermatitis. También puede dilatar los vasos sanguíneos periféricos y mejorar las manos y los pies fríos. Si se toma en grandes cantidades, la cara se enrojecerá y arderá. La niacina es abundante en el hígado animal, los huevos, la leche, el queso, el arroz integral, los productos de trigo integral, las semillas de sésamo, los champiñones, los cacahuetes, los frijoles mungos y el café. Las vitaminas B1, B2 y B6 pueden ayudar con la síntesis de niacina. Para promover la dilatación de los vasos sanguíneos periféricos, se pueden complementar entre 30 y 60 mg de vitamina B todos los días.
6: Come más frutos secos y zanahorias; toma suplementos diarios para calentar el organismo, como frutos secos como nueces, semillas de sésamo, piñones, etc. , verduras como puerros, zanahorias, coles, espinacas, etc. Frutas como los albaricoques, melocotones y papayas son las mejores opciones. Otros alimentos como la carne de res y de cordero, los mariscos, el arroz, el arroz glutinoso, el arroz integral, la soja, el tofu, las semillas de sésamo, el azúcar moreno, etc. son alimentos calientes. Las personas con manos y pies fríos deberían comer más. Se debe recordar a las personas propensas a tener las manos y los pies fríos que eviten comer alimentos fríos, productos helados o beber bebidas frías durante todo el año.
7. Cultivar el hábito de comer alimentos picantes; especias como el chile, la pimienta, la mostaza, el ajo, las chalotas y el curry pueden favorecer la circulación sanguínea. Cuando siga su dieta habitual, cómelos juntos, como agregar un poco de salsa de chile cuando coma fideos fritos o fideos de arroz fritos. Cuando beba sopa, agregue más ají; cuando coma albóndigas, combínela con un plato de sopa agridulce y comerá muchos condimentos.
8: Caliente con frecuencia los alimentos; como té de ginseng, pato al jengibre, té longan, sésamo negro, bolas de arroz glutinoso, etc. , comerlo en invierno no solo mantiene el cuerpo caliente, sino que también proporciona un tónico gradual/eficaz, y las manos y los pies ya no estarán fríos. Existen muchos medicamentos en la medicina tradicional china que pueden mejorar y prevenir el resfriado de manos y pies, como el ginseng, el dangshen, la raíz de angélica, la salvia miltiorrhiza, el cabo norte, la asta de venado, la seda de conejo, la raíz de morinda, la ramita de canela, la cistanche deserticola, el curculigo, ramita de casia, efedra, jengibre seco y pimienta, nuez moscada, Amomum villosum, etc.