¿Cómo tratar el bazo y el estómago débiles en los niños? ¿Cuál es el método?
Comer más cebada, ñame, melón de invierno y otros alimentos puede mejorar la debilidad del bazo y el estómago y aumentar el apetito. Tenga cuidado de no codiciar la frialdad. En verano, varias bebidas frías se convertirán en las favoritas de los niños, pero tenga en cuenta que dañarán el bazo y el estómago del cuerpo, permitirán la invasión del aire frío y dañarán las raíces, así que evite los resfriados y los resfriados.
2. Terapia manual
Además de los medicamentos, la dieta y otros tratamientos, el masaje también puede desempeñar un papel acondicionador eficaz en los niños. Pero debe saber que masajear a los niños requiere capacitación profesional. Durante la operación, es fácil causarle daño al niño debido a una operación incorrecta, por lo que no puede hacerlo a ciegas. Asegúrese de encontrar profesionales de instituciones profesionales o clínicas de medicina tradicional china.
3. Haga más ejercicio
Para los niños con el bazo y el estómago débiles, hacer más ejercicio puede promover el metabolismo, mejorar la inmunidad, acelerar la circulación sanguínea, ayudar a promover la motilidad gastrointestinal y mejorar el bazo y el estómago. Funciona, reduce la aparición de enfermedades y permite que el cuerpo absorba los nutrientes y los digiera.
Entre las setas vegetales, el Hericium erinaceus es un precioso hongo comestible y figura como uno de los ocho manjares. Hericium erinaceus tiene buenos efectos y combina usos nutricionales y medicinales.
Hericium contiene 26,3 gramos de proteína por cada 100 gramos, lo que supone el doble que las setas shiitake. Contiene hasta 17 tipos de aminoácidos, 8 de los cuales son necesarios para el cuerpo humano. Cada 100 gramos de Hericium erinaceus contienen 4,2 gramos de grasa. Es un auténtico alimento rico en proteínas y bajo en grasas, además es rico en múltiples vitaminas y sales inorgánicas. Hericium tiene el efecto de aumentar el apetito y fortalecer la barrera de la mucosa gástrica, y es apto para el consumo de los siguientes grupos de personas.
La primera categoría: personas de mediana edad y ancianos con poco apetito e indigestión.
Categoría 2: Gastritis crónica, acidez gástrica y distensión abdominal.
Categoría 3: Problemas gastrointestinales deficientes, estreñimiento y heces secas.
Categoría 4: Náuseas y vómitos. Mal aliento
Categoría 5: Infección bacteriana del estómago.
Categoría 6: Nutrir y reparar el estómago tras la cirugía gástrica.
Categoría 7: Regula el tracto gastrointestinal y aumenta la capacidad de absorción y digestión.