Receta para lesiones en la cabeza
Muchos padres piensan que las lesiones de sus hijos son menores y sanarán con el tiempo. De hecho, algunas lesiones menores pueden causar daños graves si no se protegen y tratan. Los padres deben ser conscientes de las siguientes tres lesiones.
Llave inglesa
Los niños traviesos son propensos a torcerse los tobillos mientras juegan y se divierten. Cuando se tuercen, les dolerá mucho el pie y el área torcida se enrojecerá y se hinchará lentamente. Si no se trata, el esguince se inflamará cada vez más y puede sentirse ligeramente rígido al tacto. Si un niño tiene un esguince, los padres deben tomar inmediatamente medidas de emergencia, como usar bolsas de hielo, y luego enviar al niño al hospital para que reciba tratamiento adicional por parte de profesionales. De hecho, los esguinces se pueden evitar en la medida de lo posible. Elegir un par de zapatos suaves y cómodos para su hijo puede ayudar a prevenir esguinces en gran medida.
Quemaduras
Una quemadura es una lesión grave. Cuando la piel de un niño se quema con agua caliente o sopa caliente, inmediatamente se enrojece y luego se acumula una gran cantidad de líquido tisular en el área quemada para proteger la piel lesionada. Esta parte del líquido tisular es lo que frecuentemente llamamos ampollas. Sin embargo, si este líquido tisular no se maneja adecuadamente, dejará cicatrices en la piel. En la vida, muchos padres escucharán los remedios caseros y aplicarán pasta de dientes o aceite de sésamo a sus hijos después de que se quemen. En realidad esto está mal. Después de una quemadura, los padres deben enjuagar inmediatamente el área lesionada con agua fría durante aproximadamente media hora y luego enviar al niño al hospital para recibir tratamiento adicional por parte de un médico. Después del tratamiento, los padres deben aplicar la pomada recetada por el médico a sus hijos a tiempo para restaurar aún más la piel lesionada del niño.
Quemaduras solares
Muchos padres pueden mostrarse indiferentes ante las quemaduras solares de sus hijos. Creen que los niños que pasan más tiempo al sol recibirán suplementos de calcio y crecerán. Los padres no pueden simplemente ver los beneficios de tomar el sol para sus hijos. Los padres deben saber que la piel de sus hijos es muy delicada, ¿no pueden soportarlo? ¿venenoso? Las quemaduras solares en los niños no sólo afectan su apariencia sino que también causan daños al tejido cutáneo circundante. Por eso, cuando los padres saquen a sus hijos a jugar, deben elegir un horario con luz suave por la mañana o por la tarde, y tomar medidas de protección para que sus hijos mantengan su piel más sana mientras se divierten.
Los niños son traviesos, pero los padres pueden proteger a sus hijos traviesos y dejarlos crecer sanamente. Por lo tanto, ante los tres tipos de traumas anteriores, los padres deben comer más bocadillos y nunca adoptar una actitud indiferente, que eventualmente afectará su salud.