Cómo distinguir la ciencia de la pseudociencia
Ciencia: los descubrimientos científicos se publican principalmente a través de revistas científicas, son revisados por pares y se adhieren a estrictos estándares de honestidad y precisión.
Pseudociencia: La literatura está destinada al público en general y no tiene evaluación, estándares, verificación previa a la publicación, estándares de veracidad y veracidad.
Ciencia: se requieren resultados reproducibles y los experimentos deben describirse con precisión para que puedan replicarse o mejorarse con precisión.
Pseudociencia: Resultados que no se pueden replicar ni verificar. Si hay investigación, siempre se describe de manera muy vaga y las personas no pueden inferir en qué investigación se han involucrado o los métodos de investigación.
Ciencia: Las búsquedas y estudios detallados fracasan porque las teorías incorrectas a menudo conducen inesperadamente a predicciones correctas, pero las teorías correctas nunca conducen a predicciones incorrectas.
Pseudociencia: Las formas de afrontar el fracaso incluyen: ignorar, poner excusas, ocultar, encubrir con mentiras, minimizar consecuencias, justificar, racionalizar, olvidar y evitar a toda costa.
Ciencia: Con el tiempo, aprendemos más sobre nuestras materias.
Pseudociencia: No descubrimiento o estudio de fenómenos o procesos físicos. Ningún progreso, ninguna comprensión de nada sustancial.
Ciencia: Persuadir a las personas apelando a evidencia física, formulando argumentos basados en razonamientos lógicos y/o matemáticos e infiriendo el mejor escenario permitido por los datos. Cuando nueva evidencia física contradice la antigua visión, ésta se abandona.
Pseudociencia: Persuadir a las personas a través de la lealtad y la creencia. La pseudociencia tiene un fuerte componente cuasi religioso: intenta convertir a la gente en lugar de convencerla. Hay que creer independientemente de los hechos, no a causa de los hechos.
Científico: No defienda ni promueva negocios o productos no aprobados.
Pseudociencia: generalmente obtenida en parte o vendiendo productos cuestionables (libros, conferencias, alimentos saludables) y/o servicios pseudocientíficos (astrología, mediciones de personalidad, información espiritual, predicciones de vida). Todos los gastos de manutención.
El cuadro comparativo anterior se puede ampliar enormemente, porque la ciencia y la pseudociencia son completamente contrarias a los métodos naturales de observación. La ciencia se basa e insiste en el autointerrogatorio, la experimentación y el pensamiento analítico, por lo que es difícil engañarse a uno mismo o evitar afrontar los hechos. La pseudociencia, por otro lado, conserva patrones de pensamiento antiguos, naturales, irracionales y no objetivos que son miles de años más antiguos que la ciencia. Este proceso de pensamiento ha dado lugar a delirios y malentendidos supersticiosos y de otro tipo sobre los humanos y la naturaleza: desde las brujas hasta el racismo, desde una tierra plana hasta un universo con forma de casa en el que Dios vive en el ático, Satanás en el sótano y los humanos en el ático; suelo; desde bailar para rezar por la lluvia hasta torturar a los enfermos mentales para exorcizar los malos espíritus de sus cuerpos. La pseudociencia anima a la gente a pensar de forma salvaje. Proponer "teorías" engañosas para hacer pensar a la gente que todas las creencias son igualmente correctas. La ciencia ha dicho desde el principio, olvidemos lo que creemos que es verdad y luego investiguemos para descubrir qué son las cosas realmente. Estos caminos no se cruzan y cada uno conduce en direcciones completamente opuestas.
Llegado a este punto surge cierta confusión por lo que llamamos “crossovers”. La palabra "ciencia" no es una medalla que cuelga del pecho de las personas, sino una actividad que realizan. Una vez que la gente deja de hacer ciencia, deja de ser científicos. De esta situación se deriva una cantidad considerable de pseudociencia (preocupante): científicos bien formados en un determinado campo se sumergen en áreas que no comprenden. Un físico que afirma haber descubierto una nueva ley de la biología, o un biólogo que afirma haber descubierto una nueva ley de la física, es casi con certeza pseudociencia. Aquellos que falsifican datos, suprimen datos que entran en conflicto con su conocimiento previo o se niegan a permitir que otros científicos vean sus datos por temor a ser investigados de forma independiente son pseudocientíficos. La ciencia es como una montaña compuesta de integridad académica, justicia y racionalidad. La cima de la montaña es empinada y resbaladiza, y se necesita mucho esfuerzo para acercarse. Si no trabajas duro, caerás en la pseudociencia. Algunas pseudociencias son producidas por personas con poca formación científica o técnica profesional. Estas personas no son científicos profesionales y no comprenden la naturaleza de la ciencia, pero se llaman a sí mismos "científicos".
Cabe preguntarse si no existen ejemplos de “cruce” en otras direcciones.
Por ejemplo, una persona que los científicos han considerado que se dedica a la pseudociencia finalmente se admite que se dedica a la ciencia auténtica, y sus puntos de vista finalmente son aceptados por los científicos. Según el resumen anterior, esta situación es extremadamente rara, si no nunca. De hecho, ya he preguntado a colegas expertos sobre este asunto. Ni yo ni ellos hemos oído hablar de un caso así, y los científicos conocen y utilizan el método científico completo desde hace cientos de años. Es cierto que un científico que sus pares creen que está equivocado, más tarde, después de adquirir nueva información, descubre que tenía razón. Los científicos, como la gente corriente, pueden tener el presentimiento de que un fenómeno es posible, pero no hay pruebas suficientes para convencer a sus colegas de que tienen razón. Estas personas no se convierten en pseudocientíficos porque insisten en que tienen razón a menos que haya montones de pruebas físicas que refuten su opinión. Es inevitable tener opiniones equivocadas o cometer errores. Todos somos humanos y estamos destinados a cometer errores, pero un verdadero científico está alerta ante la posibilidad de cometer un error y lo corrige a tiempo. Los pseudocientíficos no son así. De hecho, la definición breve de pseudociencia es "un medio para excusar, justificar y preservar el error".
Para las personas educadas y racionales, la pseudociencia es un completo disparate y absurdo, por lo que no puede hacer ningún daño. Esto es una broma. no tengas miedo.
Desafortunadamente, esta no es una actitud sabia. La pseudociencia puede ser extremadamente peligrosa y sus peligros incluyen:
infiltrarse en el sistema político y corregir la astrología en nombre de la pureza nacional.
Penetrar en el sistema educativo y desplazar a la ciencia y la racionalidad.
En el sector de la salud, miles de personas corren el riesgo de sufrir muertes y enfermedades innecesarias.
Infiltrarse en las religiones, fomentar el fanatismo religioso, tolerar comentarios contrarios y lanzar la yihad.
Infiltrarse en los medios de comunicación para evitar que los votantes obtengan información factual sobre temas públicos importantes.