Primeros auxilios para bebés con brazos dislocados
Siéntate derecho y dobla los brazos.
Deja que el bebé se siente, dobla el brazo dislocado a 90 grados y colócalo a su lado.
Estabiliza la articulación del hombro y sujeta la muñeca.
Fija la articulación del hombro del bebé con una mano, presiona con el pulgar la cabeza radial y sostiene la muñeca con la otra mano.
Supinación del antebrazo
Realiza unas cuantas supinaciones rápidas del antebrazo. Cuando escuche un clic nítido o sienta un rebote, ¡significa que la cabeza radial se ha reiniciado!
No se requiere ninguna reparación especial después del reinicio.
Si el bebé no llora de repente, puedes intentar levantar la mano afectada para coger algo. Una vez reducida la cabeza radial, generalmente no se requiere una fijación especial.
Cosas a tener en cuenta
Padres, recuerden manejar el brazo dislocado de su bebé con calma y evitar levantar objetos o cambiarse de ropa con brusquedad para evitar que se disloque nuevamente. Domine el tratamiento de reducción correcto, pero si la operación es inestable, busque tratamiento médico a tiempo para no perder la mejor oportunidad de tratamiento.