Se produjo un brote de fiebre aftosa en Leizhou, Guangdong. ¿Qué es la epidemia de fiebre aftosa porcina?
La fiebre aftosa porcina, también conocida como enfermedad número 5, es una enfermedad infecciosa aguda, febril y altamente contagiosa causada por el virus de la fiebre aftosa. Los síntomas incluyen ampollas y manchas podridas en la piel de la coronilla, los dedos y los talones. Algunos cerdos también presentan las mismas lesiones en la mucosa oral y el disco nasal. Ataca principalmente a los artiodáctilos. La fiebre aftosa porcina es muy contagiosa, se propaga rápidamente, tiene un inicio agudo y presenta altas tasas de infección y morbilidad. El tratamiento debe ser antiviral y antiinflamatorio tópico. La fiebre aftosa en cerdos suele aparecer en invierno y primavera. Los cerdos pueden enfermarse por contacto directo e indirecto, como cerdos enfermos, desechos, equipos de alimentación y vehículos de transporte contaminados. La aparición y epidemia de fiebre aftosa porcina también son inseparables de la fuente de infección, del vector y de la cadena de cerdos susceptibles. Su intensidad epidémica y rango de propagación están relacionados con diversos factores como la cepa del virus, la resistencia del huésped y el medio ambiente. La fiebre aftosa porcina es una enfermedad infecciosa grave de los animales de pezuña hendida causada por el virus de la fiebre aftosa. Se propaga rápidamente y tiene una alta tasa de incidencia. Daña principalmente a cerdos, bovinos, ovinos y otros animales artiodáctilos. Es una de las enfermedades infecciosas del ganado más graves del mundo.
Hay muchas enfermedades en las granjas porcinas, entre las cuales la fiebre aftosa es la epidemia que más teme a los ganaderos. No solo inhibe la tasa de crecimiento de los cerdos, sino que también causa víctimas. casos severos y causa grandes pérdidas a las granjas. Las granjas deben hacer un buen trabajo en la inmunización contra la fiebre aftosa, la peste porcina, la pseudorrabia y otras enfermedades, ajustar y optimizar las estrategias de prevención y control de la inmunización con vacunas, formular procedimientos de inmunización más científicos, razonables y seguros, reducir adecuadamente las vacunaciones innecesarias, reducir la frecuencia de las vacunas y reducir el riesgo de estrés. Por ello, es necesario hacer un buen trabajo en la prevención y control de la fiebre aftosa porcina.