Red de conocimientos sobre prescripción popular - Conocimientos de oftalmología - Las semillas débiles deben brotar, nunca te rindas con confianza.

Las semillas débiles deben brotar, nunca te rindas con confianza.

Nadie quiere sufrir reveses, pero nadie nunca podrá encontrarse con reveses.

¡Ya que no puedes escapar, levántate y lucha contra los contratiempos!

Los fuertes controlan su propio destino y avanzarán con valentía sin importar las dificultades que encuentren. A sus ojos, la frustración es un tipo de motivación que no tiene precio y nadie se la quitará.

Un vendedor apareció repetidamente para visitar a un cliente. Después de hacer más de una docena de viajes, el cliente obstinado simplemente se negó a asentir.

Alguien le preguntó al vendedor: "Él se negó a aceptar. ¿Por qué no se da por vencido y aprovecha el tiempo para visitar a otros clientes?""

El vendedor dijo lentamente: "Porque "No ha dicho nada todavía", porque ya ha dicho "no".

Muchas veces, los contratiempos que encontramos son en realidad solo una prueba. Si la vida no te ha dicho "no", ¿por qué rendirte antes de la guerra?

Pero muchas veces, por miedo a escuchar el "no" de los demás, nos decimos "no" a nosotros mismos primero. De hecho, siempre serás tú quien no se dé una oportunidad.

Ningún rico en el mundo lo tiene todo viento en popa. Siempre ha sido una persona rica sin experimentar contratiempos. Como dijo el gurú estadounidense del éxito, Napoleón Hill: “Antes de que el Dios de la riqueza te ponga la corona del éxito, a menudo utilizará la adversidad para ponerte a prueba severamente y ver si tu resistencia y coraje son suficientes.

British Prime. El ministro Winston Churchill es un político destacado y un orador famoso. Elogió mucho su espíritu indomable ante la adversidad. El último discurso de producción, suministro y marketing de su vida fue en una ceremonia de graduación universitaria. El discurso completo duró 20 minutos. Solo dijo dos frases. Es lo mismo: ¡Persevera y nunca te rindas!

Este discurso es un clásico en la historia de los discursos exitosos. Churchill utilizó la experiencia de éxito de su vida para decirle a la gente que no hay ningún secreto. éxito Si es así, hay dos: el primero es permanecer hasta el final y nunca darse por vencido; el segundo es cuando quieras rendirte, mira el primer consejo: quédate hasta el final y nunca te rindas. /p>