¿Puede el feto oír sonidos después de cinco meses de embarazo? ¿A cuántos meses de embarazo un bebé puede oír sonidos?
¿Puede un feto de cinco meses oír sonidos? Un feto de cinco meses puede oír, pero un feto de cinco meses sólo puede oír un audio muy fuerte. Pero si la frecuencia de audio es muy baja, es posible que el feto no pueda oírla porque el sonido es muy pequeño y quedará cubierto por la pared abdominal y el líquido amniótico.
Por lo general, el feto comienza a escuchar sonidos cuando la mujer embarazada tiene entre 15 y 20 semanas de edad, pero el feto en este período no es muy sensible a los sonidos. Cuando una mujer embarazada tiene entre 24 y 28 semanas de embarazo, el feto responderá a los sonidos externos. El feto puede moverse hacia adelante y hacia atrás en el vientre de la madre debido a los sonidos que escucha y patear el vientre de la madre de vez en cuando para demostrar su existencia. Los movimientos fetales son suaves al principio, pero gradualmente se vuelven cada vez más violentos, a menudo dando puñetazos y patadas.
Cada vez que la madre se da vuelta o hace algo, el feto se encoge silenciosamente hasta convertirse en una bola. Posteriormente, los movimientos fetales se vuelven más fuertes y, en ocasiones, muy violentos. En este momento, las mujeres embarazadas pueden reproducir más música de educación prenatal para el feto o hablar más con el feto. El feto hará algunos movimientos y recordará estos sonidos en el cerebro.
Precauciones para el encierro el encierro se refiere al período de tiempo que las mujeres embarazadas necesitan para recuperarse durante un mes o más después de dar a luz. El confinamiento se remonta al "Libro de los Ritos" de la dinastía Han Occidental, llamado "en el mes". Tiene una historia de más de 2.000 años y es una conducta ritual imprescindible tras el parto. Desde una perspectiva sociológica y médica, el "encierro" es un período crítico para ayudar a las madres a superar con éxito los puntos de inflexión fisiológicos y psicológicos de la vida.
Complicaciones
Anemia posparto, agalactia, mastitis, metritis, fiebre puerperal, prolapso uterino, retención urinaria, [3] dolores musculares, dolores de espalda, dolores de cabeza, diarrea, estreñimiento, etc. Las mujeres embarazadas con anemia pueden comer más alimentos ricos en hierro, como carne, gachas de arroz glutinoso negro, sopa de frijoles rojos, etc. Si aumenta la cantidad de leche, puede guisar 1 maltosa, 3 gramos de diente de león y 3 gramos de Wangbuliuxing para promover la excreción de leche. Para el estreñimiento, se pueden comer plátanos y pasta de sésamo (hervida y aromatizada con miel), que pueden favorecer la defecación. Si presentas fiebre o malestar extremo debido a mastitis o metritis, debes buscar atención médica de inmediato.
Recordatorio: Si tienes síndrome de confinamiento no debes retrasar el tratamiento. Es difícil tratar la enfermedad del confinamiento.