¿Cómo saber si un medicamento se ha echado a perder?
Pastillas. Si la tableta está descolorida, suelta, pegajosa o la capa de azúcar está agrietada, etc. , no sólo reducirá la eficacia, sino que a veces también producirá efectos secundarios tóxicos. Por ejemplo, la aspirina se descompondrá en ácido salicílico y ácido acético después de absorber agua. Emitirá un olor a ácido acético, que es muy irritante para el tracto gastrointestinal y puede provocar hemorragia de la mucosa gástrica.
Cápsulas. Si la cápsula está pegajosa o rota, generalmente está vencida y no debe tomarse.
Pausa. Una suspensión es una forma de dosificación en la que partículas sólidas insolubles de un fármaco se disuelven en un líquido. Los medicamentos comunes incluyen Motrin y Tylenol para niños. Si se desmoronan, cambian de color o de sabor, es posible que estén caducados.
Una botella grande de poción. Los frascos grandes de medicamentos líquidos, como jarabes y aceite de cártamo, generalmente no se agotan de inmediato y es posible que sea necesario almacenarlos durante un período de tiempo antes de usarlos. Si hay capas, sedimentación u olor, es posible que se eche a perder y no puedas seguir tomándolo.
Medicamentos externos como apósitos. Una vez abierto el parche, es fácil que se evapore, el sabor se debilitará y la eficacia se reducirá. Por lo tanto, será mejor que compre apósitos envasados individualmente. Si compra un paquete grande, preste atención al sellado.
Cabe destacar también que si el medicamento no se puede tomar por vía oral en un corto periodo de tiempo después de su prescripción, se puede marcar en la caja el tiempo de prescripción, para que la próxima vez que lo tomes, sabrá si el período de uso ha expirado. Si se descubre que un medicamento tiene los cambios sospechosos anteriores, no se recomienda usarlo incluso dentro de la "vida útil" que figura en la caja para evitar reacciones adversas.